Los bomberos recogen a un erizo que estaba acurrucado en un portal de Huesca
La Policía Local fue alertada durante la madrugada del domingo de que el animal se hallaba junto a la puerta de un edificio del Coso Alto.
Hurones, lagartos, perro, cerdos vietnamitas, serpientes, jabalíes o buitres son algunos de los animales que en los últimos años se han visto en las calles de Huesca y cuya presencia no es muy habitual en el medio urbano. En determinados casos se trata de mascotas que han escapado o han sido abandonadas por sus dueños y en otros, de ejemplares salvajes que han traspasado sus límites y han hecho una incursión en la ciudad por falta de comida en su medio.
La última sorpresa la ha protagonizado un pequeño mamífero cubierto de púas. Durante el turno de noche de este sábado 7 de mayo, en la centralita del cuartel de la Policía Local de Huesca se recibió, sobre las dos de la madrugada, la llamada de unos vecinos que alertaban de la presencia de un erizo en un portal del Coso Alto y requerían la presencia de los agentes. El animal se encontraba delante de la puerta de cristal, junto a la pared, como acurrucado y temeroso y a punto de enrollarse sobre sí mismo.
Los policías dieron aviso a los Bomberos, que se hicieron cargo del animal. Se ignora cómo pudo llegar el erizo hasta aquí, ya que viven normalmente en el campo, entre matorrales, o si pertenece a alguien que lo tenía en su casa como mascota, una función que ha proliferado en los últimos años.
Aunque por la foto parece un erizo común, habrá que determinar a qué especie pertenece, ya que algunas de ellas están contempladas en el Catálogo de especies exóticas invasoras de Aragón. Estas son el erizo de vientre blanco (Atelerix albiventris), el rizo del desierto (Paraechinus aethiopicus) y el erizo orejudo o egipcio (Hemiechinus auritus), pequeños animales (13-26 cm), que se distinguen por su vientre blanco y, en el caso del orejudo, por sus prominentes orejas. Las dos primeras proceden de África y la tercera, de Asia y las montañas del Cáucaso.
Según el mismo catálogo, estas tres especies son muy utilizadas como mascota y parece que pueden hibridarse con el erizo moruno (Atelerix algirus), autóctono de las áreas cálidas de España, incluidas las zonas más mediterráneas de Aragón. Ello generaría un problema de "introgresión genética para esta última variedad", ya que su capacidad de estivar o hibernar "hace que pudieran establecerse" en el territorio.
