Una veintena de refugiados llegan este lunes al centro de emergencia de Alcalá de Gurrea

Las estancias serán de 30 días como máximo, en los que contarán con enseñanza del idioma, atención psicológica y apoyo legal.

Visita a las instalaciones del centro de emergencia de Alcalá de Gurrea.
Visita a las instalaciones del centro de emergencia de Alcalá de Gurrea.
Víctor Ibáñez

Entorno a 20 refugiados ucranianos llegan este lunes, 18 de abril, a la nueva residencia de mayores de la localidad oscense de Alcalá de Gurrea, que se ha transformado en centro de emergencia, gestionado por Cruz Roja. Este centro se ha habilitado para estancias temporales, de 30 días como máximo.

Los ucranianos que lleguen a él tendrán enseñanza del idioma, atención psicológica y apoyo legal para conseguir la solicitud de estancia temporal y poder acceder a la asistencia sanitaria, mientras se les busca un centro de primera acogida al que serán derivados al finalizar el mes.

El coordinador de Cruz Roja en Huesca, Sifro González, ha manifestado que, al principio, estas personas tenían que llegar a través del Gobierno central, "pero, dada la situación, se permite que ucranianos que estén por la provincia puedan ir a este centro".

La puesta en marcha de esta residencia como centro de acogida ha sido posible gracias al acuerdo entre el Ayuntamiento de Alcalá, Cruz Roja y la empresa oscense Levitec, que ha sufragado los gastos de acondicionamiento. Prestará, además, dos vehículos para el desplazamiento de voluntarios y asumirá el coste de los cinco trabajadores contratados para atender a estas personas.

Cuenta también con el respaldo de los vecinos de Alcalá, muchos de los cuales se han ofrecido como voluntarios. González ha dicho que han contratado a un equipo, formado por una trabajadora social, que hará las veces de coordinadora, un educador social y cinco integradores sociales.

Esto permitirá que en el centro "siempre haya alguien, las 24 horas, los siete días de la semana", trabajadores que, además, van a tener el apoyo "del equipo que tenemos en la capital".

De momento, los refugiados estarán en el centro 30 días, hasta ser derivados a otros lugares, aunque, si se hace necesario, el espacio podría ser transformado en centro de primera acogida. En ese caso, los solicitantes de protección internacional podrían alojarse en el hasta un máximo de seis meses, podrían escolarizarse los niños y niñas y comenzarían formaciones para la búsqueda de empleo. El centro tiene capacidad para albergar hasta 35 personas.

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