El simulacro de accidente químico de Sabiñánigo, con un operativo de 150 personas, involucra a toda la localidad

Las alarmas han saltado a las 11.00, cuando han comenzado a sonar las sirenas que indican emergencia química en la localidad. Previamente se había recreado un incendio en la fábrica de Ercros, sin heridos, en el que han ardido 1.000 litros de ácido tricoloroisocianúrico.

Simulacro en Sabiñánigo
Simulacro en Sabiñánigo
DGA

Sabiñánigo ha acogido este jueves el primer simulacro de emergencia química realizado en Aragón, que ha estado coordinado por el Centro de Emergencias 112 Aragón. Un operativo de 150 personas han participado en este ejercicio, cuyo objetivo era evaluar los procedimientos de actuación ante la emergencia, la eficacia de la organización de respuesta ante la misma y los sistemas de alarma, aviso y comunicaciones. También se ha comprobado la activación de los planes de protección civil necesarios para gestionar la emergencia y la coordinación entre el Puesto de Mando Avanzado, ubicado en el Ayuntamiento de Sabiñánigo, y el Centro de Coordinación Operativa, reunido en la Sala de Crisis del 112 Aragón.

Las alarmas han saltado a las 11.00, cuando han comenzado a sonar las sirenas que indican emergencia química en la localidad. Previamente se había recreado un incendio en la fábrica de Ercros, sin heridos, en el que han ardido 1.000 litros de ácido tricoloroisocianúrico. Se ha activado el Plan de Autoprotección de la empresa y, posteriormente, el Plan de Emergencia Exterior de Sabiñánigo, poniendo en marcha las sirenas para avisar a la población de la obligación de confinamiento.

Confinada toda la población

En esta ocasión, el simulacro ha involucrado a toda la población de Sabiñánigo, donde, entre otras acciones, se han confinado cerca de 700 escolares, 120 personas mayores, se ha realojado a los asistentes al mercadillo semanal y se ha informado a los conductores de un cierre de los accesos a la población en caso de emergencia real. Igualmente, muchos comercios han cerrado sus puertas, y la megafonía municipal, al igual que los vehículos del Protección Civil, han indicado a la población que se trataba de un simulacro y lo que debían hacer.

El operativo ha estado integrado por personal de Protección Civil del Gobierno de Aragón, Bomberos de la Diputación Provincial de Huesca, medios del Ayuntamiento de Sabiñánigo y la Comarca Alto Gállego, Guardia Civil, Universidad de Zaragoza, Cruz Roja, 061 Aragón, Policía Local, Unidad de Policía Adscrita, voluntarios de protección civil, Subdelegación del Gobierno en Huesca, Delegación Territorial del Gobierno de Aragón en Huesca y de la propia empresa Ercros. Además, han asistido como observadores técnicos de protección civil de la Generalitat de Catalunya.

En caso de emergencia química, las sirenas son el primer sistema de aviso a la población. Tienen un sonido característico de alarma que empieza en modo rampa, incrementando su potencia de forma progresiva. Su sonido alcanza los 85 dB en las zonas más próximas a las sirenas y no baja de los 65 dB en las más alejadas. Además, el aviso se refuerza con megafonía tanto de Policía Local como de voluntarios de protección civil, y mensajes difundidos en radios locales y redes sociales del 112 Aragón. En el simulacro de hoy, además, se ha probado una aplicación (en fase de desarrollo) que permitirá que los habitantes de Sabiñánigo reciban la notificación de cualquier emergencia química en su teléfono móvil segundos después de que suenen las sirenas.

El simulacro de hoy es la culminación de la campaña de implantación del Plan de Emergencia Exterior de Sabiñánigo, iniciada en 2019 con la instalación de tres sirenas para alertar a la población en caso de emergencia química.

Incidente real

En mayo del año pasado se produjo un incidente real en una de las fábricas serrablesas, cuando una reacción química en la mezcladora de cloro generó una nube tóxica. En ese momento todavía había confinamiento domiciliario por la pandemia, aunque el incidente se produjo en la hora que se podía salir. En esa ocasión, la reacción de la población de Sabiñánigo fue ejemplar. Los servicios de emergencias “estuvieron coordinados perfectamente desde el primer momento a través del 112, que es quien pone en marcha el Plan de Emergencia Exterior”, que se activó durante hora y media aproximadamente. La alcaldesa Berta Fernandez recuerda igualmente que la población “supo reaccionar de forma muy positiva”. En ese accidente real se constataron “algunas cuestiones que se podían mejorar y eso es lo que estábamos testando hoy, después de diversas reuniones con el Gobierno de Aragón en las que se pusieron de manifiesto”. Uno de los problemas que se observó es que no se escucharon las sirenas desde todos los puntos de la localidad. Por eso, en marzo de este año se realizó un ensayo del sistema de aviso a la población en caso de emergencia química, y se comprobó que se escuchaban desde todos los lugares de la población.

“Esperamos que con este simulacro el plan salga reforzado y mejorado, y a partir de aquí seguiremos trabajando para que todo el mundo tenga interiorizado qué se debe hacer en caso de emergencia”, concluye la alcaldesa de Sabiñánigo.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión