La urbanización de harineras facilitará ampliar la estación ferroviaria de Huesca

Hace más de 60 años que los planes urbanísticos de Huesca recogían las necesidad de ordenar el espacio que ocupaban las dos fábricas de harinas, que en su origen se situaron en el extrarradio de la ciudad pero que con los años quedaron rodeadas de edificios. El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) ya apuntaban esta intervención como un reto. Este miércoles, el pleno municipal de Huesca ha aprobado con la unanimidad de todos los grupos políticos las modificaciones del convenio firmado entre los propietarios de este suelo (8,5 hectáreas) y el Ayuntamiento así como los cambios realizados en el diseño del polígono, ambos aprobados en 2008. Después vendrán el plan de reparcelación y el de urbanización. Los nuevos derribos comenzarán a finales de abril y las máquinas para explanar el terreno entrarán a finales de este 2021.

El alcalde de Huesca, Luis Felipe, ha señalado que el desarrollo de este gran solar será "una de las grandes transformaciones de la ciudad desde que se implantó la democracia". La operación urbanística no contribuirá solo a incrementar el parque inmobiliario de Huesca, con la construcción de 1.300 viviendas sino que también permitirá la ampliación de la estación ferroviaria para posibilitar que puedan operar la vez dos trenes AVE, además de los cercanías.

El paseo del banco azul

Luis Felipe ha recordado que el convenio para la remodelación de la estación ferroviaria se firmó en 1991, pero que la terminal todavía no está acabada. "La aprobación de este plan nos permitirá concluirla", ha manifestado. Se trata de que dos trenes AVE puedan operar de manera simultánea (ahora solo puede hacerlo uno). La prioridad es prolongar las vías de ancho internacional y el andén de alta velocidad para pasar de 197 a 400 metros. Hace tiempo que estas obras se negocian con el ADIF (Administrador de infraestructuras ferroviarias).

El alcalde ha señalado que, ahora, el 100% de la ampliación del andén y del haz de vías hasta el final del suelo urbano se hará sobre suelo público, sobre una parte del paseo del Banco Azul y terrenos de la Comunidad Autónoma donde antes había una zona de huertas cedidas a precario. El Ayuntamiento y la DGA pondrán estos terrenos en manos del ADIF.

Han sido, precisamente, la inclusión de unas prescripciones para el ámbito ferroviario por parte del gestor de Infraestructuras y de la Secretaría de Estado del Transportes, Movilidad y Agenda Urbana que no estaban recogidas en el convenio y el plan especial lo que ha demorado la aprobación de estos documentos, que estaba previsto aprobar en el pleno del 2 de marzo. Por ello, ha sido necesario convocar una sesión extraordinaria y urgente. También se han desestimado las dos alegaciones presentadas.

Plano con la distribución de los espacios en el polígono de harineras.

El alcalde ha agradecido el trabajo de los técnicos municipales, la unanimidad de los grupos políticos y todas las acciones desarrolladas por sus antecesores y antecesora en el cargo para sacar adelante esta decisiva intervención en la ciudad de Huesca.

María Rodrigo, concejala de Urbanismo, ha explicado que las modificaciones aprobadas este miércoles conciernen a tres aspectos fundamentales. Según ha dicho, los edificios tendrán una altura máxima de unas nueve plantas, lejos de las 17 que se plantearon en el plan inicial.

Además, se pondrá un cuidado especial en las zonas que quedarán para los peatones y los locales comerciales se concentrarán en las calles principales, permitiendo que en las zonas interiores las plantas bajas puedan ser utilizadas como viviendas. "Aún queda trabajo por delante, pero este es el paso más importante para cerrar la gran cicatriz urbana que supone para Huesca el espacio que ocupa el polígono de harineras".

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