La Fragatina, icono de la ciudad, se muda en medio de la polémica

Fraga cambiará de sitio su icono más conocido, La Fragatina, situada en el centro de la plaza de España. La fuente sobre la que se alza será desmantelada y la estatua, que está dedicada a la mujer fragatina, desplazada. Probablemente, se moverá tan solo unos metros, pero los suficientes para hacer variar la imagen típica de la ciudad y para generar una animada polémica.

El cambio de ubicación está incluido en el proyecto de remodelación de la plaza de España y el paseo Segoñé, que ha generado un acalorado debate a nivel político y ciudadano. Y no solo por el desplazamiento de la escultura, que, según el proyecto redactado, permanecerá en el mismo entorno, aunque sin especificar el lugar exacto. También por otros aspectos controvertidos como la supresión de 32 plazas de aparcamiento o la creación de una nueva zona peatonal.

La remodelación del paseo Segoñé y la plaza de España, que supondrá una inversión de 1,2 millones de euros, no entraba en los planes del equipo de gobierno. De hecho, deriva del hallazgo fortuito de los restos de un pozo de hielo, que aparecieron en enero de 2020, a raíz del reventón de una tubería. La obligación de preservar el nuevo vestigio ha sido "aprovechada" para mejorar y renovar las prestaciones de este espacio y, al mismo tiempo, para dar solución a algunas de las deficiencias que arrastra el corazón de la ciudad, entre ellas, las continúas filtraciones de agua, el deterioro de las aceras o el hundimiento del pavimento, según explica la alcaldesa de Fraga, Carmen Costa (PP).

La primera edil dice ser "muy consciente" de que las actuaciones afectan a un lugar emblemático y en consecuencia, "es normal que exista diversidad de opiniones". Ahora bien, deja clara una cuestión: "La Fragatina tendrá un lugar privilegiado. La estatua no se va a demoler ni se va a escorar en un rincón. La Fragatina estará en un lugar destacado entre la plaza España y el Segoñé, que es lo que se merece. No nos la vamos a llevar a las afueras".

El proyecto no determina el lugar exacto en el que se reubicará. Solo dice que será "en el propio entorno de la plaza". Y eso alimenta la polémica. El equipo de gobierno explica que es imposible de determinarlo con antelación, ya que las obras sacarán a la luz nuevos vestigios, especialmente 'sitjas' (silos de cereales), que deberán estudiarse y dependiendo de su valor, preservarse, lo que condicionará la instalación de la escultura.

Sus explicaciones no acaban de convencer a una parte de la oposición. El PSOE, el más crítico con el proyecto, habla de "desmantelamiento" del monumento, que fue creado en los años 80 y que ensalza a las 'dones de faldetes', protagonistas del Día de la Faldeta (Fiesta de Interés Turístico Nacional). Los socialistas no comparten que la recuperación del pozo de hielo, hallado entre la plaza de España y el paseo Segoñé, justo delante de la escultura, obligue a desplazar "al principal símbolo de la ciudad", tal y como señala su portavoz, Ángel Sorolla.

Al PSOE, tampoco le convence la estructura diseñada para proteger y contemplar el nuevo pozo de hielo, una marquesina de cristal, que, según la formación, presenta "unas dimensiones desproporcionadas". Y, además, critican que sea retirada la fuente sobre la que se sitúa La Fragatina.

Desde el equipo de gobierno, se explica que la fuente causa muchas de las filtraciones que afectan a los edificios de la zona y además, señalan que el monumento debe desplazarse, al quedar encajonado entre los restos del pozo de hielo y el antiguo ayuntamiento.

El proyecto de remodelación, que se divide en tres fases y tiene un periodo de ejecución de nueve meses, conlleva además la modernización de la red de abastecimiento, la renovación del actual pavimento o la creación de un nuevo vial hacia la zona del Revolt. También suprime el tráfico de un lateral de la plaza España, lo que conlleva la pérdida de 32 plazas de aparcamiento, que, según la primera edil, se compensarán con el parquin de La Pista.

El PSOE critica este último aspecto y además, denuncia que la remodelación destierra el mercadillo semanal, lo que, unido al resto de cambios, conllevará importantes pérdidas para los negocios de la zona.

Falta de consenso y participación

Ahora bien, la crítica más generalizada está en la falta de consenso y participación. Y aquí coinciden grupos políticos y colectivos vecinales. "Nos hubiera gustado que se abriera un proceso participativo y de este modo, aportar ideas antes de la redacción del proyecto", señala una de las vecinas de la zona afectada, Rosa Arqué. "A partir de aquí, una vez conocido, hay gente a la que le gusta más y gente a la que le gusta menos", añade, tras explicar que a posteriori todos aquellos que lo han solicitado han sido recibidos en el consistorio y han recibido una explicación completa del proyecto.

La presidenta de la asociación de vecinos del casco histórico, Marianto Beltrán, también dice echar de menos una mayor participación ciudadana. No obstante, recuerda que se trata de un proyecto sobrevenido por la aparición del pozo de hielo y en relación a los cambios en la movilidad, considera que cualquier ciudad debe aspirar a contar con "espacios más amables y tranquilos". Asimismo, reconoce que se trata de una obra "necesaria", especialmente al dar solución a los problemas de filtraciones. Y, en relación a La Fragatina, confían en que, tal y como han señalado desde el equipo de gobierno, tendrá un lugar destacado dentro de la zona afectada por la remodelación.

Compromiso por Fraga también es de la misma opinión. De hecho, a través de las redes sociales, la formación ha insistido en que la escultura "no se va a mover del Segoñé y lo sabemos todos". «Quienes están agitando el tema, también, pero no les importa», añaden. Compromiso por Fraga, junto al PAR, son los dos únicos partidos que apoyan en líneas generales el proyecto, al considerar que da prioridad a los peatones, soluciona problemas y revaloriza el centro de la ciudad.

Frente a ello, PSOE, Podemos y Ciudadanos consideran que el equipo de gobierno ha actuado "de espaldas al resto de formaciones y a la ciudadanía", al no abrir un proceso participativo, algo "esencial", en su opinión, por la envergadura del proyecto y por sus afecciones sobre un lugar emblemático de la ciudad. Desde Ciudadanos, señalan que no ha sido presentado al resto de formaciones ni analizado en ningún comisión.