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El Parque de Ordesa rechaza prohibir la entrada de perros en una ajustada votación

La iniciativa había sido planteada por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos en nombre de los grupos ecologistas. Las denuncias por llevarlos sin correa han aumentado este año hasta las 112.

El acceso a la pradera de Ordesa ha sido cerrado en nueve ocasiones a lo largo de este año al alcanzar el límite de aforo.
El acceso a la pradera de Ordesa ha sido cerrado en nueve ocasiones a lo largo de este año al alcanzar el límite de aforo.
E. V.

Los propietarios de perros podrán seguir visitando el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido sin restricción, más allá de llevarlos siempre con correa. Así lo ha decidido el Patronato en su última reunión tras una ajustada votación ya que diez de los miembros rechazaron prohibir la entrada de estos animales frente a los otros siete que sí apoyaron la medida planteada hace un año a iniciativa de la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos (FCQ) en nombre los grupos ecologistas y que sí está en vigor en Francia.

Dentro del Patronato hay representantes de Parques Nacionales, el Gobierno de Aragón, la Diputación Provincial de Huesca, la Confederación Hidrográfica del Ebro, los Ayuntamientos de Torla, Fanlo, Bielsa, Broto y Tella-Sin, el CSIC, la Guardia Civil y representantes de otros colectivos como empresarios del área de influencia socioeconómica, ganaderos, cazadores o ecologistas. La única novedad ha sido la incorporación de la nueva directora del Organismo Autónomo de Parques Nacionales, María Jesús Rodríguez de Sancho, tras llegar al cargo en septiembre.

La propuesta se puso encima de la mesa hace un año por los problemas de gestión que planteaba la presencia de los perros como conflictos con vacas, con otros perros y con otros propietarios, las molestias a la fauna silvestre, la acumulación de excrementos en la red de senderos, el posible contagio de enfermedades...

Los miembros del Patronato decidieron dejar un margen de un año para hacer un estudio más exhaustivo y ver si aumentaban o disminuían los conflictos, mejoraba la conducta de los dueños... "Pero la realidad es que el problema no ha hecho más que aumentar", asegura la directora del Parque, Elena Villagrasa. Y prueba de ello es que las denuncias por llevarlos sin correa -sancionadas con 100 euros- han vuelto a aumentar hasta las 112 y en los dos meses de servicios de autobuses a la pradera de Ordesa se vendieron casi 1.800 tiques para transportar perros

Pese a ello, se ha impuesto la opinión mayoritaria de que antes de llegar a una medida tan drástica como prohibir la entrada, hay que reforzar antes las acciones y campañas de concienciación, educación y responsabilidad ambiental "porque consideran, entre otros motivos, que socialmente los perros forman parte de muchas familias y provocaría una limitación en el tipo de visitantes que viene al Parque", ha señalado Villagrasa. Así, se han dado un nuevo plazo para ver la evolución de los comportamientos "y si no se observan cambios, entonces ya se prohibiría".

Mientras, los miembros del Patronato que sí apoya la restricción argumentan que la vida silvestre es la que tiene que dominar y hay que garantizar la normalidad "y los animales domésticos tienen que estar en su casa y en los parques urbanos, porque en un Parque Nacional son un elemento extraño que viene a molestar tanto por ruidos como por sus parásitos o sus excrementos". 

Buen balance de la temporada covid con descenso de visitantes

Por otra parte, el Patronato de Ordesa ha hecho balance de esta 'temporada covid' haciendo una valoración muy positiva "porque hemos ido adaptando los servicios necesarios en cada una de las fases pese la dificultad de cambiar la planificación de un día para otro para una plantilla que ha llegado a las 130 personas en verano", ha afirmado la directora. Además, se ha congratulado porque no han tenido que cerrar puntos de información ni ninguno de los accesos a los valles. 

En cuanto a las cifras de visitantes, los primeros datos apuntan a que han descendido en Ordesa respecto a 2019, que fue un año récord por el Centenario. En cuanto a la ocupación de los párquines, la pradera se ha tenido que cerrar nueve veces en este 2020 (siete por llenar el aparcamiento y dos por alcanzar el máximo aforo con los autobuses). Además, se han contabilizado unos máximos de 534 vehículos en Pineta, "que es mucho para ser el año en el que estamos", recuerda Villagrasa, 261 en Añisclo, 114 en Escuaín y 78 en Tella.  

También ha destacado el buen funcionamiento del servicio de autobuses que gestiona el Auntamiento de Torla con Tragsa ya que desde el 10 de julio al 13 de septiembre se pudo prestar de forma ininterrumpida con la frecuencia ya prevista y al mismo precio del año anterior. "Ha sido un esfuerzo tremendo porque si se hubiese contagiado alguno de los conductores o de las personas que controlaban los tiques y las barreras, hubiera habido que suspenderlo todo. Pero dentro de lo complicado que ha sido el año, hemos tenido suerte", ha subrayado.

Entre los acontecimientos extraordinarios de este año, desde el Parque han destacado un incendio en la cabecera del barranco de Airés por un rayo que obligó a estar más de 10 días en alerta roja para evitar que se adentrara en el Parque; y la caída de 130 litros por metro cuadrado que cayeron en Ordesa el pasado 19 de septiembre, que deshizo la red de senderos, movió puentes y rompió escolleras. "Ahora hay que valorar todos los desperfectos y ver cómo conseguimos los fondos para repararlos".

El Patronato ha analizado también una solicitud para la instalación de una explotación ganadera de ovino en Torla, en Zona periférica de Protección. "En general se está muy a favor de que gente joven tengan iniciativas así de apoyo a la ganadería extensiva aunque tendrá que cumplir todas las condiciones medioambientales que le exija el Inaga para que tenga el menor impacto posible", ha explicado.  

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