El Parque Nacional de Ordesa proyecta un parquin de 260 plazas y un nuevo puente en el valle de Pineta

El plan de mejora del acceso, con un coste de 845.000 euros, resuelve el riego de inundación y el estacionamiento incontrolado.

Vehículos estacionados en el valle de Pineta, en el Parque Nacional de Ordesa.
Vehículos estacionados en el valle de Pineta, en el Parque Nacional de Ordesa.
Gobierno de Aragón

El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido transformará su imagen en la entrada por el valle de Pineta, el segundo sector más frecuentado con casi 200.000 visitantes al año, gracias a la construcción de un parquin y un nuevo puente. Las obras de mejora del acceso estaban incluidas en la lista de prioridades del centenario, pero los fondos de patrocinio resultaron insuficientes. El mecenazgo de la efeméride sí ha permitido financiar la redacción de los proyectos y ahora queda la parte más difícil, encontrar 845.000 euros para su ejecución.

Se ha diseñado un nuevo puente para salvar holgadamente el cauce del Cinca (el río atraviesa longitudinalmente todo el valle), desde la carretera; y también un aparcamiento con capacidad para 259 turismos (hay dos plazas de minusválidos) y 5 autobuses. Este segundo proyecto, entregado la semana pasada al Parque y al Ayuntamiento de Bielsa, pondrá fin al riesgo de inundaciones y a los estacionamientos incontrolados en uno de los paraje más visitados de Aragón.     

"Necesitábamos ordenar los accesos y sobre todo que la carretera de Pineta acabará en un aparcamiento, no en una barrera (la de la entrada al parador Nacional) como hasta ahora, que era lo que más vergüenza daba", afirma Miguel Noguero, alcalde de Bielsa, que lleva años reivindicando una ordenación de esta entrada del Parque Nacional. Valora positivamente que por fin se hayan finalizado los proyectos, redactados por la empresa pública Sarga y costeados con cargo a los fondos de patrocinio del centenario, tal y como se acordó en la comisión de seguimiento. 

Nuevos accesos a Ordesa
Nuevos accesos a Ordesa
HA

El responsable municipal es consciente de que ahora empieza el largo camino para financiar las obras. Noguero espera contar con la ayuda de la Diputación de Huesca y sus planes provinciales para pagar el aparcamiento, presupuestado en 135.451 euros (con IVA); y del Gobierno de Aragón para el puente, que costará 710.055 euros, "tal y como se comprometió". Aclara que se podrían sacar adelante por separado.

El nuevo aparcamiento está situado en zona periférica de protección, al final del valle. Actualmente se accede a Pineta por la carretera A-2611 y tras cruzar el pequeño puente sobre el río Cinca se aparca en las explanadas cercanas al cauce. Esto supone un riesgo, al estar en una superficie inundable en caso de avenidas extraordinarias por lluvias torrenciales, por lo que se ha prohibido su uso. Un segundo problema es que al no disponer de un lugar adecuado se produce una dispersión de coches incontrolada, "con el correspondiente deterioro que genera en el entorno", señala el proyecto.

Ambos inconvenientes se evitan en las épocas de mayor afluencia turística, los puentes o los meses de verano, cuando el estacionamiento está regulado por el Ayuntamiento, que cobra a los conductores por dejar su coche y obliga a aparcar más lejos del cauce, precisamente en la zona elegida para el nuevo parquin. Sin embargo, el resto del año no hay vigilancia ni zonas específicas delimitadas. Además, en invierno la zona es una pista de esquí de travesía, de forma que cuando nieva la circulación de vehículos se hace imposible y no resulta viable la llegada de los usuarios.

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Una área asfaltada y otra verde

El nuevo proyecto habilita dos zonas diferenciadas: una superficie asfaltada para invierno, por donde puede transitar una máquina quitanieves; y otra de suelo natural y viales acondicionados para el resto del año. La primera dispondrá de 40 plazas para coches y 5 para autobuses y la segunda, de 219 turismos.

Cuando en el año 2018 se pidió información a la Confederación para diseñar el proyecto ya advirtió que no autorizaría instalaciones permanentes porque los terrenos utilizados como parquin eran de dominio público hidráulico, lo que obligaba a buscar otra ubicación. El suelo es propiedad del Ayuntamiento de Bielsa y para reducir su impacto visual se ha tenido en cuenta que las obras no requieren talar ningún árbol de gran porte y se reduce al mínimo el área asfaltada.

El puente multiplica su longitud por cuatro

El nueve puente tendrá 40 metros de longitud, frente a los 12 actuales, e incluso se ha dimensionado para llegar a 60, siguiendo las instrucciones dadas por la CHE para salvar el cauce del río. Bielsa planteó hacer una plataforma de 20 m, pero la Confederación la consideró insuficiente. "La primera propuesta de la CHE superaba los 70 metros porque los estudios de inundabilidad calcularon periodos de retorno de 500 años", dice el alcalde, que cree que está sobredimensionado. "Cuando la gente lo vea le parecerá una barbaridad teniendo en cuenta lo que hay", advierte. 

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