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El Balneario de Panticosa amplía su oferta con un nuevo Centro Sanitario Termo Medicinal
El histórico Balneario del Quiñón, donde se trataban afecciones médicas gracias a las propiedades de sus aguas minero-medicinales y termales vuelve a estar dedicado a la recuperación de pacientes y sus dolencias.
Las Termas del Quiñón recuperan su esencia como Centro Sanitario y destino Termo Medicinal y se incorporan a la oferta del Balneario de Panticosa. De esta manera habrá dos zonas, la nueva instalación y las Termas de Tiberio, el espacio Termo-Lúdico dedicado al bienestar y la belleza, que cuenta con diferentes piscinas y tratamientos específicos, donde poder disfrutar y relajarse.
El nuevo balneario se encuentra en los bajos del edificio del hotel Continental 2 y hasta hace poco tiempo se utilizaba en contadas ocasiones. Ahora, se ha renovado por completo ampliando las instalaciones existentes y complementando de esta manera las piscinas interior y exterior que ya existían.
El histórico Balneario del Quiñón, donde se trataban afecciones médicas gracias a las propiedades de sus aguas minero-medicinales y termales, de reconocidas propiedades para el tratamiento de patologías reumatológicas, respiratorias y dermatológicas, entre otras, vuelve a estar dedicado a la recuperación de pacientes y sus dolencias médicas. Ofrece innovadores tratamientos mediante nuevas salas de peloterapia, albercas, chorros aéreos y pasillos de marcha, entre otros y las ya conocidas de quiromasaje y quiropraxia para el tratamiento de diversas dolencias.
Desde principio de año, el Balneario cuenta con un Director Médico, el doctor Antonio Hernández Torres, Médico Hidrólogo, con más de treinta años de experiencia en este sector, tanto a nivel científico-investigador, como en tratamientos, especialmente con Peloides Naturales Antioxidantes (barros termales), fabricados con aguas minero-medicinales, que consiguen unos beneficios excepcionales en dolencias de tipo reumatológico, dermatológico y vasculares.
Las nuevas instalaciones del Balneario del Quiñón, incluyen un pasillo de marcha para la estimulación podal y fortalecimiento de las articulaciones del tobillo, una sala de Peloterapia donde se tratarán, mediante peloides (barros termales) diferentes afecciones reumatológicas y vasculares, ducha masaje Vichy, sala para tratamientos de quiropraxia y quiromasajes y dispensadores para cura hidropínica (de bebida) con las que poder enseñar a los pacientes a ‘pasear el agua’.
Además, se recupera la zona de tratamientos atmiátricos (respiratorios) y Vaporarium, así como la del chorro aéreo termal descontracturante. Pero el punto principal ha sido la reestructuración de la antigua piscina termal, como una nueva zona natural de Albercas de agua durmiente, que incluye chorros subacuáticos de hidromasaje. Además, una piscina exterior con chorros a diferentes alturas, 2 cuellos de cisne y géiser. Todo esto supervisado por el equipo médico.
También, se tiene previsto crear un área especializada para el tratamiento de patologías vasculares, especial para deportistas (senderistas, ciclistas, post esquí, etc) con maniluvios, pediluvios y chorros aéreos filiformes, al igual que los utilizados en conocidas termas francesas.
Las aguas del Balneario de Panticosa se caracterizan por ser hipertermales, emergiendo de la tierra a una temperatura de 53ºC, siendo una de las de mayor termalidad peninsular y europeas, con características iónicas alcalinas blandas, fluoradas, sulfuradas, bicarbonatado sódicas y oligometálicas. Por estas características, presentan propiedades analgésicas y son muy beneficiosas para el tratamiento de enfermedades osteo-articulares reumatológicas, como artrosis y artritis, dermatológicas como psoriasis y dermatitis, patologías respiratorias, como el asma y EPOC, y cuadros de estrés y ansiedad, gracias a la presencia de gas radón en sus aguas.
