Fomento confirma la apertura este jueves de dos nuevos tramos de la A-23 en Monrepós que ahorrarán 3,5 km de viaje

El Ministerio de Fomento ha confirmado que este jueves, 21 de marzo, pondrá en servicio dos nuevos tramos de la autovía A-23 en la provincia de Huesca, entre el Alto de Monrepós y Lanave, y abrirá también al tráfico, temporalmente en modo bidireccional, un tercer tramo de nueva calzada entre Congosto de Isuela y Arguis. Además de una mejora en la seguridad, los conductores ahorrarán 3,5 km de recorrido en el sentido hacia Jaca y 1,5 en el sentido hacia Huesca.

No habrá cortes de cinta ni discursos políticos a pie de carretera ya que la Ley Electoral prohíbe a estas alturas actos de inauguración y propaganda. La fecha de apertura, no obstante, coincide con las previsiones que hicieron primero el anterior Gobierno del PP y luego el del PSOE.

Fomento destaca que son unas obras enmarcadas en un entorno montañoso de gran complejidad geológica y geotécnica, el puerto de Monrepós. A estas dificultades se ha añadido la imprescindible compatibilidad de los trabajos con el mantenimiento del todo el tráfico existente en la actual carretera N-330, sobre la que se apoya en su mayor parte la calzada sentido Huesca de la autovía si bien en algunos tramos se han realizado acondicionamientos en su trazado.

El presupuesto global de las tres actuaciones que se pondrán mañana en servicio asciende a 208,3 millones de euros, con una inversión total de 238,5 millones de euros una vez sumado el importe de las expropiaciones y las asistencias técnicas de redacción de los proyectos y de control y vigilancia.

En concreto, en el Alto de Monrepós-Caldearenas, se abrirán 4,1 km de nuevo trazado que conforman la calzada sentido Jaca de la autovía, dando continuidad al tramo Arguis-Alto de Monrepós, en servicio desde 2014, y conectando con el siguiente tramo, Caldearenas-Lanave. La otra calzada en este tramo la aporta la actual N-330 mejorada, objeto del contrato de obras del siguiente tramo Caldearenas-Lanave.

Se desarrolla sobre una longitud de 4.083 m de los que 1.086 m lo hacen a cielo abierto y el resto a través de un túnel de 2.997 m de longitud: el túnel de Caldearenas, que después del de Somport es el túnel de carretera más largo de los existentes en Aragón. Está dotado de los equipamientos de seguridad más innovadores de los disponibles en el mercado, destacando el sistema de iluminación de tipología led con un sistema de gestión puesta a punto, la instalación de cámaras térmicas y la integración de la plataforma de control en un SCADA único para todos los túneles. Acompaña a este túnel una galería de evacuación paralela con conexiones entre galería y túnel cada 375 m, coincidentes con la ubicación de sendos refugios peatonales, siendo también singular la geometría de los apartaderos para la prevención de choques frontales. En este tramo también destaca la ejecución de sendos viaductos con longitudes de 175 m y 35 m.

Mientras, en el Caldearenas-Lanave se estrenarán 2,2 km de nuevo trazado que conforman la calzada sentido Jaca de la autovía (dando continuidad al tramo anterior), y se suman a los 4,5 km finales de este tramo puestos en servicio en julio de 2018.  Este subtramo recorre la cara norte del puerto de Monrepós, desde su cumbre (cota 1.280 m) hasta el río Guarga (cota 715 m) e incluye el túnel de Escusaguas (395 m). 

Además, se abrirán otros 8,5 km de la calzada sentido Huesca, que se apoya en la actual N-330 y que hasta este momento ha funcionado en sentido bidireccional. En esta calzada se han llevado a cabo ajustes en el trazado, entre los que destaca la construcción del viaducto de Fontanal, de 465 m de longitud, que aunque ya finalizado, no se pondrá en servicio hasta que se extienda la capa de rodadura en toda la calzada del tramo. Debido a ello, habrá afecciones al tráfico a partir del lunes día 25 de marzo con una duración prevista de 3 semanas.

Por último, el tramo Congosto de Isuela-Arguis se abrirán 2,3 km de nuevo trazado, incluido un túnel de 920 metros, que conforman la calzada sentido Jaca de la autovía, temporalmente en modo bidireccional. Esto permitirá liberar la otra calzada, actual carretera N-330, para poder llevar a cabo los trabajos de rehabilitación y adaptación a la normativa vigente en los tres viaductos existentes sobre el río Isuela.

Dentro de este tramo, en julio de 2018 ya se realizó una puesta en servicio parcial, a falta de capa de rodadura, del último kilómetro de autovía (construido como duplicación de la calzada de la N-330), entre el enlace de Arguis y la unión con el tramo Arguis-Alto de Monrepós, en servicio y que le da continuidad.