Huesca

Los vecinos del barrio de Santo Domingo piden demoliciones en San Félix y San Voto

Les preocupa el estado de los edificios colindantes al colegio Sancho Ramírez que aún no han sido derribados.

En las plazas de San Félix y San Voto quedan varios edificios viejos por demoler
Los vecinos de Santo Domingo piden que se actúe en San Félix y San Voto
J. S.

“Que se derriben cuanto antes”. Esa es la petición que realiza el presidente de la asociación de vecinos del barrio de Santo Domingo y San Martín de Huesca, Miguel Ángel Campo, en relación a los edificios colindantes con el colegio de Sancho Ramírez y que se encuentran, como asegura, “muy deteriorados”. Teme asimismo que sea la crisis económica la que esté impidiendo llevar a cabo estos trabajos.


En la zona se han derribado ya varios edificios antiguos y que se encontraban deshabitados. Como se recordará, uno de ellos fue además víctima de un incendio en 2012, se encontraba pegado a uno de los inmuebles cuya demolición solicitan desde la asociación vecinal y que lindan con el centro educativo. “No tiene sentido que se mantengan en pie, ya que no está previsto edificar nada en su lugar”, asegura Campo.


El plan de reurbanización previsto en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) prescribe así la construcción en el espacio ocupado por los antiguos edificios –de unos 4.800 metros cuadrados– de una plaza, mientras que en la confluencia entre las calles del Olmo, Sancho Ramírez y la plaza de San Voto levantarán un centenar de viviendas, trabajos que se deben llevar a cabo a través de la Junta de Compensación. El solar, de momento, permanece vacío a la espera de ser intervenido. La zona se encuentra a día de hoy delimitada por unas vallas de color amarillo que marcan la separación entre calzada y acera. Este es un paso que es utlizado durante el curso escolar por muchos de los alumnos del colegio Sancho Ramírez.

Medianeras y solares

El presidente de la junta vecinal de los barrios de Santo Domingo y San Martín llama la atención, asimismo, sobre el solar de la calle de Lanuza que hace esquina con la calle de Sobrarbe. “Al haberse derribado el edificio quedan expuestas las medianeras que, en nuestra opinión deberían arreglarse con el fin de que evitar que el edificio se degrade por ese lado”, subraya el portavoz vecinal, quien hace extensiva esta demanda al resto de casas que han quedado en este estado tras las demoliciones.

“No se trata de una cuestión de estética, y aunque los solares hayan sido vallados para que no entre nadie, puede desprenderse igualmente algún fragmento de la pared, por lo que no es cuestión de que esté así”, añade Campo y pone como ejemplo el buen acondicionamiento, a su juicio, del que han sido objeto las medianeras en los solares de la calle Quinto Sertorio.


La calle de Lanuza cuenta además, recuerda el presidente de la asociación de vecinos, con numerosos edificios abandonados que presentan algún tipo de deterioro, por lo que insta también a sus propietarios a que lleven a cabo su reparación.


El Ayuntamiento de Huesca ha señalado, por otra parte, que está pendiente de que el Jurado de Expropiación Forzosa de Huesca remita el acuerdo sobre la valoración de varias fincas incluidas en la unidad de ejecución. Como indican dichas fuentes, una vez que se solucione esta cuestión, la Junta de Compensación finalizará la redacción del proyecto de reparcelación, que entregará al Ayuntamiento para su tramitación. Una vez se apruebe este documento está previsto que se de luz verde al comienzo de las obras de reurbanización. “El Ayuntamiento está en continua comunicación con la Junta, con el fin de conocer el estado del proyecto de reparcelación, entre otras cuestiones. Se han enviado además órdenes de ejecución para que se arreglen las medianeras”, añaden dichas fuentes.-