Más de un millar de personas han salido a la calle en Huesca con motivo de la celebración del 1 de Mayo, fiesta de los trabajadores. Dos han sido así las manifestaciones convocadas para esta jornada. La primera, organizada por los sindicatos UGT y Comisiones Obreras bajo el lema “Trabajo, dignidad, derechos”, partía a las 12.00 de la plaza de Navarra con unos 800 participantes y al grito de “No nos mires, únete”, con el que los participantes se han dirigido a aquellos que han quedado a observar desde las aceras. 

La marcha ha tomado la calzada de los Porches de Galicia, cortados al tráfico para la ocasión, para ascender después por la calle de Villahermosa hasta la plaza de Luis López Allué, donde tiene su sede la Confederación de Empresarios Oscense (CEOS-Cepyme). Les ha seguido, a una corta distancia, una representación de la plataforma Hambre de Justicia, que representa a los ciudadanos que iniciaron el pasado 14 de abril una huelga de hambre. El recorrido ha finalizado en el parque Miguel Servet de Huesca, con la lectura de manifiestos ante el monumento de Las Pajaritas, obra del escultor Ramón Acín.

“Es una vergüenza que tengamos más de seis millones de parados y que el Gobierno lo haya dado todo por perdido. Por eso estamos aquí, para decirles que esto tiene que cambiar y denunciar su negligencia ante estos problemas tan graves”, comentaba Jesús Mainz, uno de los asistentes a esta manifestación. “Ante esta situación, hay que moverse, porque quejarse en el bar es muy fácil”, añadía Carlos Ferrer, también presente en la marcha. “Estamos aquí para ayudar a mostrar un poco de fuerza y decir que no estamos de acuerdo con lo que está pasando y que hay otras alternativas”, afirmaba Manuel Contreras, otro de los manifestantes. “A mí lo que me llega al corazón son los más de seis millones de parados. Con la actual política de recortes no llegamos a ningún sitio. Hay que sacar a la gente adelante”, subrayaba, por otra parte, Jorge Arias, otro de los asistentes.

Entre los portavoces de los sindicatos convocantes se encontraba, por otra parte, Olga Alastruey, en representación de la Federación de Enseñanza de UGT. “Tenemos que estar aquí”, aseguraba, “en primer lugar, por los 6.200.000 parados que tiene este país y en segundo lugar, para seguir manifestando nuestra total oposición a la política de recortes que afecta a todos los sectores”. También asistió Antonio Biescas, secretario general de las Juventudes Socialistas del Alto Aragón. “El Gobierno está fracasando de forma absoluta en sus políticas. Nos prometieron que iban a terminar con el problema del paro y ha sido todo lo contrario”, señalaba el joven.

El Grupo Crítico

Media hora más tarde, en torno a las 12.30 comenzaba la segunda de las manifestaciones del día, la del Grupo Crítico, liderado por las formaciones CGT, CNT, Huste y SOA junto a otros partidos políticos de izquierdas y movimientos ciudadanos como el 15-M o la Marea Roja. Todos ellos forman el llamado Grupo Crítico. Al son de ‘carraclas’ más de medio millar de manifestantes partían también de la plaza de Navarra con una pancarta en la que podía leerse: “Nada que negociar, ni reforma laboral ni pacto social”. Por la derogación de la Reforma Laboral”. Fueron en dirección, de nuevo, a la plaza de Luis López Allué, donde hubo cantos reivindicativos como “Menos crucifijo y más sueldo fijo” o “Menos fútbol y más barricadas”. Entre las pancartas podían leerse mensajes de protesta, como “No es una revolución, es una mutación”, pero también optimistas, como “Nos sobran esperanzas”. La manifestación continuó después por el Coso Alto hasta la calle del Parque, para concluir en el punto de inicio con la lectura de manifiestos por parte de los portavoces de los grupos participantes.

Entre los asistentes había gente joven, como Luis, que había acudido como asociado de CGT y militante, a su vez, de Equo. “El Primero de Mayo tiene su parte de fiesta, pero también de reivindicación, con el fin de reclamar los derechos de los trabajadores, que hoy en día se encuentran en grave retroceso”, comentaba este joven. “Venimos a reivindicar, en primer lugar, dignidad, la cual está sujeta por muchos otros derechos que se encuentran escritos en nuestra carta magna y que están siendo asolados”, añadió Luis Tudela, quien también había optado por participar en esta concentración.

“No es solo el día de los que tenemos trabajo, sino también el de los que no lo tienen, para se mejoren sus condiciones, porque se realizan recortes por donde se deben hacer y no reciben apoyos para encontrar un empleo”, aseguraba, por otra parte, otra joven manifestante, Sonia Rico. También acudieron participantes de los pueblos cercanos, como Elías, de Tardienta. “Creo que estamos en la prehistoria del ser humano, porque estamos aguantando tanto como entonces o más”, aseguró.