DEFENSA 

El director del Hospital General de la Defensa de Zaragoza, nombrado inspector general de Sanidad Militar

El general Juan Antonio Lara lleva 33 años en el Hospital Militar de Zaragoza y cuatro de ellos al frente del mismo.

El general Juan Antonio Lara, director del Hospital Militar de Zaragoza, muestra la Gran Cruz al Mérito Naval que le entregó el rey Felipe VI el pasado día 6 en la Pascua Militar.
El general Juan Antonio Lara, director del Hospital Militar de Zaragozar.
Toni Galán

El director del Hospital General de la Defensa de Zaragoza, general Juan Antonio Lara Garrido (Sevilla, 1964), ha sido nombrado inspector general de Sanidad Militar por el Consejo de Ministros. Esta decisión le supondrá el ascenso en los próximos días a general de división y la necesidad de que algún otro general se sitúe al frente del Hospital Militar en Zaragoza.

El general Juan Antonio Lara es médico pediatra, lleva 33 años viviendo en la capital aragonesa y dirige el Hospital Militar desde febrero de 2020, cuando sustituyó a la zaragozana Ana Betegón, que estuvo un año en el cargo y fue llamada a la Inspección General de Sanidad en Madrid.

Su papel ha sido fundamental en el traslado de las víctimas de guerra ucranianas hasta el centro hospitalario de la capital aragonesa, ya que han atendido 94 heridos en los dos año. De hecho, esta misión le hizo merecedor de la Gran Cruz al Mérito Naval que le entregó el rey Felipe VI en la Pascua Militar. 

Una planta especial para los ucranianos 

El general Lara creó una nueva planta dedicada exclusivamente a este tipo de atención a los militares ucranianos. Tiene una capacidad para 30 camas, en las que se atiende ahora a 22 heridos y  cuatro familiares que les acompañan y pernoctan con ellos por la gravedad que presentan.

El director del Hospital Militar ha recordado que la llegada de los primeros tres heridos ucranianos tuvo lugar el pasado 5 de mayo de 2022, apenas dos meses después de que empezara la guerra. Y siempre ha destacado que la demanda fundamental para estas víctimas ha sido sobre todo las prótesis de piernas o brazos, que han perdido por las explosiones en el conflicto, y también han recibido algo de cirugía.

En los cuatro años que lleva al frente del Hospital de la Defensa en Zaragoza, el general Lara consiguió que se ampliara la plantilla con 21 trabajadores (cinco médicos, seis enfermeras, seis auxiliares de enfermería, dos celadores y dos fisioterapeutas) con contratos de tres años. Entre los especialistas hay dos traumatólogos, un rehabilitador, un anestesista y una psiquiatra.

Además, el general Lara siempre ha destacado que ha evolucionado la atención a los heridos de guerra: “Nos hemos tenido que adaptar y tener equipos multidisciplinares e interhospitalarios, sobre todo con especialistas del Hospital Miguel Servet. Esa ha sido la clave”, incidió en declaraciones a HERALDO.

“Estos pacientes requieren una atención integral porque tienen afecciones múltiples. Todos llegaban afectados por una onda explosiva. Hemos pasado de colocar un brazo, un pie o una pierna, con una estancia de tres meses, a gente que van a requerir hasta un año de ingreso por sus afecciones más graves. Algunos llevan tres operaciones en los oídos, por ejemplo, y necesitan de nuevos tímpanos; varias intervenciones en los muñones, con cirugía plástica; o colocarles una dentadura postiza”, detalla el director del centro hospitalario.

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