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Las familias del colegio Ana María Navales de Zaragoza reclaman la puesta a punto de la calefacción
Educación asegura que se ha dado un ultimátum a la empresa, mientras se calientan las clases con la aerotermia.
Las familias del colegio Ana María Navales, del barrio de Arcosur de Zaragoza, no ganan para disgustos. Tras empezar el curso en unas "pésimas condiciones", al haber eliminado el anterior consejero, Felipe Faci, las aulas prefabricadas, y los retrasos acumulados en las obras; ahora, con la llegada del invierno, todavía se están haciendo "pruebas de funcionamiento" en la calefacción y aún no se ha concedido el permiso definitivo del gas.
De momento, las clases se calientan por aerotermia, pero este viernes, según apuntaron desde el ampa, comenzaron el día con "los termostatos apagados y algunas zonas con 15 grados". Desde el Departamento de Educación explicaron que, por algún problema, el sistema se desconectó y se encendió nada más abrir el colegio. Al ‘mediodía’ las temperaturas oscilaban entre los 19,5 y 20,5 grados.
Estas mismas fuentes destacaron que ya se ha dado un "ultimátum" a la empresa para que termine de legalizar las instalaciones y que se está haciendo un seguimiento diario de la situación. En estos momentos, las clases se calientan a través de la aerotermia y está previsto que el lunes se lleven calefactores para terminar de regular la temperatura de algunas aulas, que están peor situadas y, por ende, se quedan a temperaturas más bajas.
Desde el ampa iniciaron este viernes un calendario de adviento con esta queja, a la que se irán sumando cada jornada, a través de sus redes sociales, otros déficits que encuentran en su día a día. Recuerdan que estos alumnos, de entre 3 y 6 años, "conviven con las obras" del resto de edificio, por lo que en las clases tienen "contaminación acústica" tanto por parte de la maquinaria como de los albañiles. Además, señalan que en las zonas de uso de alumnado encuentran varillas de soldadura, tornillos y escombros.
Todo ello culminará el próximo 22 de diciembre con una gran fiesta de Navidad, en el Departamento de Educación, a la que animan a acudir "con panderetas, zambombas y ganas de cantar". Reclamarán una mayor celeridad en las obras y la búsqueda de soluciones para sus problemas actuales, además de la construcción de la segunda fase del edificio.
