Las lluvias dejan hasta 250 litros en el Pirineo y obligan a desembalsar Yesa
Este viernes por la noche comenzó a nevar en las estaciones de esquí y cayeron en picado las temperaturas hasta los 6,8 bajo cero.
El otoño sigue regando generosamente el Pirineo aragonés. La última borrasca ha vuelto a dejar copiosas precipitaciones acumulando hasta 250 litros en Espierba, en el valle de Pineta (Bielsa), lo que ha provocado crecidas súbitas de muchos ríos. Y aunque no ha habido que lamentar graves afecciones, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) sí ha tenido que abrir las compuertas de Yesa durante dos días de forma preventiva.
Este viernes por la noche, la caída de las temperaturas (el termómetro midió hasta 6,8 bajo cero en Astún-La Raca y -5,5 en Cerler-Cogulla) hizo que esas lluvias se transformaran ya en nevadas comenzando a cubrir las estaciones de esquí, que están expectantes ante los espesores que deje este frente y también la nieve que puedan producir con los cañones para decidir el próximo lunes si anuncian o no su apertura para el puente.
La Aemet prevé para este sábado precipitaciones ya débiles con la cota de nieve bajando de 1.200 a 1.000 metros. El domingo se mantendrá igual la situación y para el lunes espera nuevas nevadas, sobre todo en la zona occidental, con la cota subiendo transitoriamente por la tarde a 1.500 metros.
Desde la CHE destacaron que Yesa es un embalse "estratégico" de la cuenca del Ebro que abastece a casi un millón de personas entre la ciudad de Zaragoza y municipios de Navarra y de Aragón, garantiza el regadío en las Bardenas "y cumple su importante función de laminación de avenidas". Prueba de ello es que ante el incremento de caudal del río Aragón, ya vertió el jueves 100 metros cúbicos por segundo de forma preventiva y el viernes otros 200.
Con el incremento de caudal del río Aragón, el embalse de Yesa está vertiendo, de forma preventiva, 100 m3/s (30/11) y 200 m3/s hoy 1/12 pic.twitter.com/yjTSpd96WY
— CH del Ebro (@CH_Ebro) December 1, 2023
Los pluviómetros del proyecto EMAs Sobrarbe registraron en los dos últimos días 250 litros en Espierba, 200 en Bielsa, 105 en Salinas y 78 en Broto. Mientras, las estaciones de la Aemet contabilizaron en esas mismas 48 horas cerca de 120 litros en Canfranc y Biescas, 117 en Astún-La Raca y 105 en Formigal-Sarrios.
Los caudales de los ríos se dispararon. El Cinca, por ejemplo, pasó en Escalona de 39 metros cúbicos por segundo a una punta de 600; el Ara en Boltaña, de 6,7 a 189; el Aragón en Canfranc, de 2,5 a 28; el Gállego en Sallent de 0,6 a 18; y el Ésera en Campo de 5 a 100, según la CHE, que este viernes por la tarde emitió un comunicado informando de que los caudales en el Pirineo aragonés estaban ya estables y en descenso tras cesar las lluvias.
Los embalses ganan 80 hectómetros en dos días
Como consecuencia de ello, los principales embalses del Pirineo han ganado otros 80 hectómetros cúbicos con este nuevo episodio de lluvias y muchos están por encima del 80% de capacidad como Mediano (81%), El Grado (86%), Barasona (88%), Yesa (87%), Búbal (85%) y La Peña (96%). Los porcentajes más bajos se sitúan en la cuenca del Noguera Ribagorzana: Escales está al 68%, Santa Ana al 40% y Escales al 18%.
