Los aragoneses gastan el 7% de sus ahorros por la inflación un año después de tocar techo
Es la Comunidad, junto a Madrid (-11%), que más reduce sus depósitos tras la contención del gasto por la pandemia.
Los ahorros acumulados por los aragoneses en las entidades bancarias, que no paraban de crecer tras la contención del gasto que propició la pandemia, han empezado a caer como consecuencia de la inflación. Tras tocar techo en junio de 2022, con 39.061 millones de euros en cuentas y depósitos, se ha pasado en un solo año a 36.322 millones. Supone un descenso del 7%, solo superado en todo el país por la Comunidad de Madrid (-11%). Mientras, los créditos llevan una senda similar, al caer un 7,6%, pero en este caso están muy lejos de los niveles de endeudamiento alcanzados en la crisis financiera de 2008.
Los datos del Banco de España publicados recientemente dejan bien claro que las economías familiares comienzan a notar los efectos de la escalada de precios de los últimos años, como consecuencia de la guerra en Ucrania y la crisis energética. En el conjunto del país, los ahorros familiares han caído un 3,24% en este último año, cifra que los aragoneses prácticamente duplican.
Tras Madrid y Aragón destaca la pérdida del 5% de los ahorros de los vecinos de La Rioja. Por contra, siguen aumentando los depósitos en Andalucía (2,96%), al igual que en Canarias (2,1%).
El ritmo de gasto en Aragón es notable en estos doce meses: se reducen 7,5 millones de euros al día. No obstante, los 36.322 millones que todavía guardan en sus cuentas y depósitos todavía es una cifra elevada si se compara con la serie histórica. Hasta que se declaró la pandemia, en marzo de 2020, la cifra rondaba, de manera estable, los 34.500 millones de euros. Pero las restricciones de movilidad y de ocio que impusieron las autoridades sanitarias propiciaron una histórica contención del gasto.
Las deudas también caen
En el lado opuesto de la balanza, el dinero endeudado de los aragoneses también se reduce. En el último año, los créditos bancarios de la Comunidad han pasado de 33.016 millones de euros a 30.485 millones, es decir, un 7,60%. En este caso, se trata de la cifra más baja desde la burbuja inmobiliaria, en la que se llegaron a rozar, en diciembre de 2008, los 48.000 millones en préstamos pendientes de devolver.
La inflación no solo ha encarecido la cesta de la compra, los viajes o los carburantes, frenando así la tendencia de ahorro que se inició con la pandemia, también ha llevado al Banco Central Europeo a subir los tipos de interés a un ritmo vertiginoso. En consecuencia, la firma de hipotecas se ha visto afectada, y las familias con intereses variables se enfrentan a graves dificultades para cumplir con los pagos mensuales.
En cualquier caso, el último dato disponible arroja algo de esperanza para el sector, al menos en Aragón. En concreto, el pasado julio se constituyeron 953 hipotecas en la Comunidad, un 6,5% más que en el mismo mes del año pasado. Si se compara con junio de este 2023, el crecimiento aún es mayor, del 13,4%. La mejora, aunque se da sobre unos registros que venían siendo a la baja, es la mejor del país, que en su conjunto cayó un 18,8%.
