El conductor que mató a ‘Luismi’, futbolista del CD Fuentes se enfrenta a 5 años de cárcel

Víctor G. H., el conductor que circulaba ebrio y drogado cuando causó la muerte del joven futbolista del CD Fuentes Luis Miguel López Andrés en la N-232, será finalmente juzgado como presunto autor de delitos contra la seguridad vial (circular bajo los efectos del alcohol y las drogas), conducción temeraria, homicidio por imprudencia y lesiones.

La Fiscalía solicita para él cuatro años de cárcel y la privación del carné durante seis, mientras que la acusación particular eleva a cinco años la pena de prisión y a diez la retirada del carné.

El accidente se produjo en la noche del 8 de diciembre de 2022. Luis Miguel López, conocido como Luismi, volvía a Zaragoza tras haber entrenado con su equipo, el CD Fuentes, cuando el vehículo de Víctor G. H. invadió de forma descontrolada su carril, ya que acaba de chocar contra otro turismo, y embistió el suyo causándole la muerte. El compañero de equipo que viajaba en el asiento del copiloto resultó ileso y logró detener el coche chocando varias veces con la valla de la carretera.

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La Guardia Civil ya constató en el mismo lugar del siniestro que el infractor iba bebido y drogado. El etilómetro y el test que registran el consumo de sustancias estupefacientes así lo revelaron. El hombre, de 40 años, triplicaba la tasa de alcoholemia permitida -dio un resultado de 0,78 mg/l en la primera prueba y 0,75 mg/l en la segunda- y positivo en anfetaminas, exactamente 308,4 ng/ml.  

Además del alcohol y las drogas, circulaba a gran velocidad, de noche y con niebla intensa, adelantando de manera indebida en línea continua y circulando incluso por el centro de la calzada. 

El infractor, defendido por la abogada Carmen Sánchez, ha estado 7 meses en prisión preventiva. La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Zaragoza, encargada de la causa, se había negado en dos ocasiones a decretar la medida. La propia Audiencia Provincial se opuso a finales de febrero a dejar en libertad a Víctor G. H., de 40 años y vecino de La Zaida, por su "grave y reiterado" desprecio a la ley, el alto "riesgo de fuga" y la posibilidad "objetiva" de que volviera a cometer un delito similar. Pero a principios del pasado mes de julio le fue otorgada la libertad provisional al entender la jueza que habían variado las circunstancias.