Deportes

Julen Tejero: "De pequeño veía los Juegos Olímpicos como algo imposible, pero ahora... ¿por qué no?"

Este joven zaragozano (2000), hijo de los deportistas de élite Daniel Tejero y Nekane Martínez, participó el pasado mes de agosto en la Copa de España de halterofilia.

Julen Tejero Martínez, en el gimnasio del Centro Natación Helios de Zaragoza
Julen Tejero Martínez, en el gimnasio del Centro Natación Helios de Zaragoza
Francisco Jiménez

Julen Tejero Martínez (Zaragoza, 2000) ha mamado de la halterofilia desde que nació. Sus padres, Daniel Tejero y Nekane Martínez, auténticos referentes de esta disciplina a nivel nacional, le inculcaron los valores del deporte desde que era pequeño. Con cuatro años ya hacía elevaciones con el palo de la escoba y pesas con papel y cartón. Ahora, este joven zaragozano viene de participar en la Copa de España, quedando octavo, y pone su horizonte en la clasificación para el campeonato absoluto de Europa de 2024.

¿Qué sensaciones le dejó la Copa de España, con un octavo puesto?

Fue como una recompensa al trabajo de la temporada. Una recompensa y unas vacaciones con mi familia. Ir ahí y clasificarse ya fue algo muy gratificante, pero al final nos pilló en pretemporada. Estamos empezando ahora a entrenar duro para lograr el pico de forma en octubre. No estaba en mis mejores marcas, pero fui con esas sensaciones.

"Es un apoyo el saber que no puedo tener mejor entrenador que mi padre, que es el que mejor me conoce"

Venía de una larga lesión.

Estuve desde septiembre de 2022 hasta abril o mayo de este año con una tendinopatía bastante fuerte en la zona de la cadera. Me sigue molestando, pero lo estamos sobrellevando. Hice de todo. Me hice todas las pruebas posibles con varios médicos, especialistas... Al final fuimos a un rehabilitador, que me ayudó bastante.

O sea, ¿compitió con dolor?

No exactamente. Estamos acostumbrados a cosas peores, por lo que solo era molestia. Lo más duro fue sobre todo al principio, desde septiembre hasta diciembre de 2022 no podía levantar ni 20 kilos. Qué desesperación... Ahora ya estoy bien.

El legado familiar en la halterofilia habla por sí solo. ¿Siente la presión de ser mejor que sus padres?

No. Con mis padres al contrario. Sé que ellos ya han pasado por esto, entienden cómo me siento y lo que pasa por mi cabeza... Para mí es todo un apoyo. La presión me la meto yo a mí mismo. La gente me lo suele decir de cachondeo, pero yo nunca lo he pensado. Pienso en mejorar y tengo su apoyo. Ellos están conmigo. Mi padre es mi entrenador. Mi madre me pregunta y hablamos sobre la halterofilia... Es un apoyo el saber que no puedo tener mejor entrenador que mi padre, que es el que mejor me conoce.

¿Cómo lleva lo de compaginar el trabajo con el deporte?

Llevo dos meses trabajando, y he de decir que es difícil. Es duro, pero llevo mis horarios, sé el tiempo que tengo. Me ha hecho prescindir de cosas que no sirven para nada. Intento exprimir el tiempo al máximo. Me levanto, me hago todas mis comidas, me voy a entrenar y luego a trabajar.

Requiere mucha disciplina.

Ahora estoy bastante bien, pero en la preparación para la copa lo pasé mal. La presión de intentar estar lo mejor posible y encima trabajando... El cuerpo también necesita descansar. No obstante, es una vida que me llevo preparando mucho tiempo. Es duro, pero cuando me subo a la tarima y voy a entrenar me compensa.

Ha crecido rodeado de deportistas, al igual que su hermana, Irati. ¿Qué valores le inculca una disciplina como esta?

Sacrificio y constancia. Sin esas dos cosas no se podría dar todo lo demás. Y más en mi carrera, que no ha habido otra cosa. Siempre he estado mal por dolores y problemas. Si no hubiera tirado de allí... En 2018 tuve una mi peor lesión, una rotura distal del tendón rotuliano, que no tenía un buen pronóstico, y nadie sabe cómo, pero me curé.

El deporte, muchas veces, es vida.

Al final, es tener una rutina y no puedes fallar pase lo que pase. Un día estás mal y vas a entrenar, una semana no te apetece entrenar, pero vas igual... En la semana que te apetece entrenar, lo das todo...

"En mi gimnasio hay gente más fuerte que yo, pero no me ganan porque a la hora de levantar la fuerza que  tengo la traslado al levantamiento"

Estuvo en la Residencia Blume, en Madrid, donde sus padres forjaron su palmarés. ¿Qué le aportó esta vivencia?

Me sirvió, sobre todo, para comparar cómo es la carrera deportiva de una persona que está en un centro así a cómo no. Aunque fue un poco agridulce porque justo me coincidió con la rotura, fue una experiencia bonita, convivir con los mejores deportistas y estar rodeado de gente que aspira a lo mismo que tú. En esa parte fue reconfortante. Además, la estancia en Madrid, que nunca había estado allí. Es una etapa de mi vida que recuerdo bonita.

En la halterofilia, ¿más vale maña que fuerza o más vale la técnica?

Más vale la técnica. Se trata de buscar la eficiencia del levantamiento. Al final, es física, y también hay fuerza, pero en mi gimnasio hay gente más fuerte que yo y no me ganan porque a la hora de levantar la fuerza que yo tengo la traslado al levantamiento. Es mejor tener técnica. Siempre puedes ir ganando más fuerza con el tiempo y con la práctica.

A veces se les llama ‘forzudos’. ¿Qué opinión le merece?

Es hablar sin saber. Hasta que no vean una competición van a hablar por hablar. Llevo toda mi vida aguantando comentarios que no se hacen a malas, todo lo contrario, de gente que no sabe lo que es. Te lo tomas a risa y le sigues el juego. Yo lo entiendo. Además, en el mundo de las pesas hay diferentes sectores: gimnasio, ‘strongman’, el que levanta piedras. Meten a todos en el mismo saco. Viendo una competición lo entenderían.

"La sensación de ir un día a entrenar y ver que levantas un kilo más es la que engancha"

¿Qué diferencia a esta disciplina de otras?

Es un deporte individual, pero a la vez tienes un equipo porque estás en un gimnasio pequeñito, todos haciendo lo mismo. La halterofilia me gusta mucho, porque si entrenas siempre te vas a superar y vas a registrar marcas que luego son abatibles. Va a ser algo objetivo. Siempre vas a mejorar, con trabajo, pero vas a depender de ti. Nadie te va a quitar mérito. La sensación de ir un día a entrenar y ver que levantas un kilo más es la que engancha.

Ha batido ya récords con tan solo 22 años y ha participado en la Copa de España. ¿Cuál es el siguiente techo por romper?

El objetivo, antes de diciembre, es clasificarse para el campeonato absoluto de Europa de 2024. Está bastante cerca. Solo hay que seguir y apretar y lo conseguiré.

Los Juegos Olímpicos... ¿Un sueño?

Cuando yo me lesioné en septiembre, veía todo negro. Nos sorprendimos a nosotros mismos, tuvimos que adaptar los entrenamientos y dimos con la tecla, con mi mejor estado de forma. He hecho marcas que me he sorprendido a mí mismo. Me he visto capaz de mucho más de lo que me veía. ¿Por qué no? No lo veo nada imposible. Yo si algo sé es que lo voy a dar todo. Que sea lo que sea, pero ojalá ir a los JJ. OO. Es un sueño que tengo desde pequeñito. Tengo dibujos en mi cuarto, un dibujo de mí mismo en los JJ. OO. e inventándome el sitio donde era y lo que levantaba. Es algo que ves imposible y ahora que soy más adulto y lo veo más cerca... Ojalá.

También hay que tener suerte.

Una temporada nunca sabes con lo que te va a sorprender.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión