Se derrumba parte de la fachada de una vivienda deshabitada de Tarazona sin causar daños personales

El desplome se ha producido esta mañana de domingo, posiblemente como consecuencia de las intensas lluvias de las últimas horas.

Así ha quedado la fachada de la vivienda turiasonense afectada tras el desprendimiento
Así ha quedado la fachada de la vivienda turiasonense afectada tras el desprendimiento
Ayuntamiento de Tarazona

Parte de la fachada de una vivienda deshabitada en mal estado del barrio de San Miguel de Tarazona se ha derrumbado este domingo sobre la vía pública sin causar daños personales. Todo apunta a que las intensas lluvias caídas en las últimas horas han podido provocar la caída de este paramento de la portada de la casa, aunque desde el Ayuntamiento han precisado que tampoco se puede asegurar, ya que en esta parte del casco antiguo de la localidad hay varios inmuebles con problemas de conservación.

El edificio afectado se encuentra en el número 26 de la calle Larga y se trata de una casa antigua de dos alturas que se alza en la parte más moderna del casco histórico turiasonense. Los técnicos municipales han visitado este domingo por la mañana el lugar y se ha procedido a proteger el entorno del inmueble para evitar riesgos.

Está previsto que este lunes se empiece a actuar. "Posiblemente habrá que llevar a cabo algún derribo parcial, es una actuación que se está valorando y también tenemos que contactar con los propietarios", ha señalado el alcalde turiasonense, Tono Jaray. El desprendimiento, ha especificado, se ha producido desde "una altura de metro y medio" y tampoco ha causado desperfectos materiales.

Las afecciones provocadas por el paso de la DANA (depresión aislada en niveles altos) se siguen dejando sentir este domingo. Un gran desprendimiento de rocas ocurrido a primera hora de este domingo ha cortado la única carretera de acceso al casco urbano de Beceite, una de las localidades más turísticas de la comarca del Matarraña y en la que viven 550 vecinos.

Las únicas vías de comunicación que tienen ahora los vecinos de Beceite son caminos forestales y la pista asfaltada que conduce hasta el pantano de Pena y de allí a Valderrobres. No obstante, esta última vía es estrecha, no tiene línea divisoria de carriles y supone un recorrido de 10 kilómetros frente a los seis que separan Beceite de Valderrobres por la carretera TE-V-3350, que es la que ha quedado interrumpida.

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