Esta es la estrategia de Aragón para lograr la igualdad e inclusión de la población gitana
El documento presentado este jueves por el Departamento de Ciudadanía del Gobierno aragonés recoge 125 medidas para aplicar hasta 2026.
En la actualidad la población gitana en Aragón supone algo más del 1% de la población total. Aunque en números absolutos Zaragoza tiene el volumen más importante, en algunas localidades llegan a superar el 15% del total de habitantes y, en oposición al histórico estereotipo de nómadas, la mayor parte llevan largas décadas asentados en sus municipios. Llama la atención la juventud de este colectivo, la tercera parte es menor de 16 años frente al 15% de la población general. Por el contrario, es notablemente reducido el porcentaje de mayores de 65 años: un 11,3% frente al 21,3% en el conjunto de la población.
Esta es la radiografía, a grandes rasgos, de la presencia del pueblo gitano en la Comunidad que se incluye en la estrategia para la igualdad, inclusión y participación de este colectivo que ha presentado este jueves el Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales del Gobierno aragonés. Recoge nueve ámbitos de acción, 44 objetivos estratégicos y 125 medidas para aplicar hasta 2026 y viene a dar continuidad a la primera que se puso en marcha entre 2018 y 2020.
Abordar la segregación escolar de manera paralela al logro del éxito académico; asegurar el acceso universal a servicios esenciales como agua, saneamiento o electricidad; reducir las desigualdades en el ámbito de la salud; o igualar las tasas de pobreza y exclusión social de la población gitana a las del conjunto de la Comunidad son solo cuatro de los desafíos que se plantea esta iniciativa.
Para el asesor técnico del Departamento, José Antonio Seisdedos, que lleva trabajando con las asociaciones gitanas desde 2015, dos de las iniciativas "prioritarias" pasan por potenciar la escolarización temprana de los niños gitanos de 0 a 3 años facilitando a las familias el acceso a las guarderías y aulas de 2 años en los colegios, y reducir el abandono escolar temprano.
Aunque en el ámbito educativo se ha avanzado en los últimos años, persiste una brecha importante en el título de Secundaria, donde un 64% no lo obtiene, frente a un 13% de los jóvenes en general, según los datos que recoge el informe del Gobierno aragonés. La continuidad en los estudios posobligatorios ahonda más esta diferencia, y a los 18 años 8 de cada 10 jóvenes gitanos ya no estudia, mientras en el resto de la población esta situación afecta a 3 de cada 10.
La puesta de largo de esta estrategia ha contado con la presencia de la gerente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), Noelia Carbó, y de los líderes de las tres entidades del sector que también han participado en su elaboración: Asociación de Promoción Gitana de Zaragoza, Federación de Asociaciones Gitanas de Aragón (FAGA) y Fundación Secretariado Gitano.
También han asistido representantes de los seis departamento de la DGA que han participado en el proceso (Ciudadanía, Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, Economía y Educación), además de los ayuntamientos de las tres capitales de provincia y de tres comarcas: Jacetania, Valdejalón y Bajo Aragón.
El problema de la vivienda
La presidenta de la FAGA, Pilar Clavería, ha reivindicado más políticas públicas dirigidas a la creación de vivienda protegida y pisos de alquiler accesible y ha destacado que gracias a la colaboración del Gobierno aragonés hay jóvenes gitanos que se han formado como mediadores. En este caso, el dosier del Ejecutivo autonómico recoge los casos de exclusión residencial específica que se producen en Épila, donde hay un importante número de infraviviendas en la zona de Los Cabezos con graves problemas de habitabilidad, y en los hogares de población gitana de origen rumano que viven del empleo temporal en zonas agrícolas de Valdejalón y Bajo Cinca. Con los vecinos de etnia gitana que viven en Los Cabezos en sus mayoría en casas cueva y cuevas, por ejemplo, ya se lleva a cabo un programa de promoción comunitaria.
“Lo más importante –ha destacado la gerente del IASS- es que esta estrategia es fruto de un trabajo de colaboración y participación que nos va a permitir afrontar algunas situaciones desde una perspectiva global; que incluye la salud, la vivienda o la educación, por ejemplo. Esa forma transversal de afrontarlo nos facilita conseguir los objetivos de integración, porque la infravivienda o el acceso a los servicios sociales, por citar dos supuestos, al final están relacionados si hablamos de reducir desigualdades”.
Desde que se comenzó a trabajar con el grupo de participación del pueblo gitano en 2015 hasta el 2022 (ambos incluidos), el IASS ha financiado 83 proyectos mediante las convocatorias de innovación (cofinanciadas por el Fondo Social Europeo) o la asignación tributaria del IRPF. Estos proyectos han impactado en unas 1.500 personas de etnia gitana cada año y han supuesto una inversión en este tiempo de 6,1 millones.
