Igualdad

Menos absentismo y mejores notas: el programa contra el abandono escolar para niñas gitanas empieza a dar frutos

El Ayuntamiento de Zaragoza mantendrá este 2023 la iniciativa, en la que participan 63 niñas. También se ha ayudado a 37 mujeres en paro a volver al sistema educativo.

Una de las clases del programa municipal
Una de las clases del programa municipal
Ayto. de Zaragoza

Hasta 63 niñas gitanas participan en el programa contra el abandono escolar impulsado por el Ayuntamiento de Zaragoza en colaboración con la Asociación de Mujeres Gitanas Romi-Cali, una iniciativa que ha empezado a dar sus frutos en forma de una menor tasa de absentismo y mejores resultados académicos. La intención, ha explicado este lunes la concejala de Mujer e Igualdad, María Antoñanzas, es “impulsar la igualdad en la comunidad gitana a través de la educación”, motivo por el que también se trabaja con las familias y con mujeres adultas sin trabajo que tratan de reincorporarse al sistema educativo en busca de más oportunidades laborales.

Las estadísticas dicen que alrededor de un 64% de jóvenes gitanos no logran superar la Educación Secundaria Obligatoria, y que las niñas dejan los estudios a los 12 años, dos años antes que los chicos, lo que hace que cuando llegan a la vida adulta, su participación en el mercado laboral sea inferior a la del hombre.

Con estas clases se pretende “avanzar hacia la igualdad”, buscar una escolarización plena e implicar a las familias manteniendo siempre los rasgos culturales de la comunidad. Por el momento se desarrolla en siete centros escolares de la capital de los barrios de Oliver, Torrero, La Paz y San José, tanto en primaria como en secundaria.

De acuerdo con Antoñanzas, cada vez hay más jóvenes gitanos con estudios medios o superiores, “pero no es suficiente”, de ahí la necesidad de seguir trabajando. Especialmente importante, ha destacado Pilar Cerdido, una de las maestras de este programa, es trabajar con las familias. Esto hace que los programas de motivación estén abiertos a todos sus miembros, incluyendo algunos abuelos. “Trabajamos en coordinación con colegios e institutos, con reuniones prácticamente semanales”, ha dicho.

En este sentido, la presidenta de la Asociación Romi-Cali, Pilar Clavería, ha incidido en que estos niños y niñas son “el futuro” de su pueblo. “Se está avanzando mucho, y querríamos abarcar más, llegando a todos los rincones de Aragón y a municipios como Épila. El objetivo es que tengan sus carreras y puedan ocupar buenos puestos de trabajo”, ha señalado, al tiempo que ha agradecido al Consistorio su ayuda y entendimiento. Por ello, en el caso de las 37 mujeres que han decidido volver a estudiar, el trabajo se centra en charlas motivacionales, preparación técnica para superar los exámenes o cursos sobre métodos de estudios, entre otros aspectos.

El programa cuenta con un presupuesto de 25.000 euros anuales, una cuantía que “dados los buenos resultados y la importancia de trabajar en este campo”, se mantendrá en este 2023, según han avanzado desde el área de Mujer e Igualdad.

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