La cafetería y la sala polivalente del complejo social de Valdefierro se retrasarán a una segunda fase por el alza de los precios
El proyecto de la DGA mantiene su esencia con 100 plazas de residencia de mayores, 60 viviendas y el centro de día.
El complejo social del zaragozano barrio de Valdefierro será una realidad en 2025, si el alza de los precios no vuelve a interponerse en la que será la mayor inversión del Gobierno de Aragón en una residencia de mayores. La primera licitación quedó desierta, explicó este miércoles la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, al coincidir la presentación del proyecto con "el encarecimiento de los materiales".
"Teníamos dos posibilidades: no hacer la obra o disminuir el volumen. Y nosotros queríamos hacerla", detalló. Por lo que se volvió a sacar a licitación con el mismo presupuesto, pero eliminando la cafetería y la sala polivalente, que se pensaba usar como gimnasio, biblioteca, guardería y servicios para jóvenes. Ambos quedan ahora relegados a una segunda fase que se proyectará de la obra.
Pese a ello, la esencia, que es la residencia de mayores, se mantiene intacta. En lo que antes era el centro de menores El Buen Pastor se construirá una residencia de 100 plazas, un centro de día con 40 y 47 viviendas para mayores. También habrá otras 13 para jóvenes en proceso de inserción social, fomentando así el "intercambio generacional". El presidente de Aragón, Javier Lambán, detalló que de los 85 millones remitidos de los fondos europeos a la Consejería de Ciudadanía para los años 2021-2023, casi 52 están dedicados a residencias y de ellos, 24,3 se destinan al complejo de Valdefierro.
Puso en valor el cambio de concepto residencial. "En los últimos años hemos impulsado planes de mayores muy ambiciosos", recalcó, al tiempo que señaló que no se trata de un acto de "solidaridad", sino de "justicia". "Les devolvemos una mínima parte de lo que ellos han aportado a la sociedad en democracia", insistió.
En este sentido, Vicente Pérez, uno de los arquitectos del proyecto explicó que la idea era contar con un "entorno amable y seguro". Y así se llegó a un recorrido "cerrado" de tres edificios principales: la residencia y dos de viviendas. El primero estará distribuido en unidades de convivencia de 12 y 8 plazas, con la mayoría de las habitaciones individuales. Además ahí se encontrará el centro de día, con "una entrada independiente", la cocina central y la lavandería, entre otros.
Otro edificio acogerá 47 viviendas para mayores de uno (38) y dos dormitorios (9) y el último estará formado por 13 pisos para jóvenes. "Tendrán una tipología de corrala, en torno a espacios ajardinados", apuntó. Todo ello con el objetivo de "abrir la convivencia a la comunidad".
"El complejo será de consumo energético prácticamente cero", especificó. Se conseguirá gracias a las placas solares, la geotermia y los cerramientos planteados. Y, además, está pensado para que sea completamente accesible, teniendo en cuenta las dificultades de movilidad, de visión o cognitivas de los habitantes. En abril termina el periodo de licitación y la construcción está estimada en 24 meses.
