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El incendio ha calcinado 800 hectáreas en Teruel y las 250 personas evacuadas no pueden regresar a sus casas
Durante la noche el viento ha girado al oeste, lo que ha facilitado el control de las llamas en la zona aragonesa pero las ha complicado en la Comunidad Valenciana.
El primer gran incendio forestal de la temporada, declarado este jueves, en los límites entre las provincias de Teruel y Castellón y que ha obligado a desalojar a 250 personas de las localidades aragonesas de Olba y San Agustín sigue activo, aunque ha evolucionado favorablemente por la noche en la parte aragonesa. La superficie provisional afectada entre las dos comunidades autónomas es de 3.000 hectáreas -en un perímetro de 30 kilómetros- de las que unas 800 hectáreas corresponden a Aragón.
De momento, los 250 vecinos evacuados no van a poder regresar a sus hogares, ya que la cabeza del fuego avanza hacia el norte y "amenaza" con llegar los barrios de Olba, ha confirmado este viernes el jefe de Seguridad y Protección Civil del Gobierno de Aragón, Miguel Ángel Clavero, tras una primera noche en la que un operativo de cien efectivos se han empleado a fondo en primera línea para controlar las llamas. También continúa cortada la carretera A-232, que da acceso a Olba.
Esta zona de la cabeza es la más complicada de atacar por los accesos y la orografía, mientras el resto del flanco izquierdo aragonés está asegurado y se encuentra en fase de estabilización.
"Se han cumplido las previsiones meteorológicas y por tanto el viento por la noche ha girado a oeste, lo cual nos ha facilitado y nos ha favorecido para el control del flanco izquierdo ,que es el que afecta a nuestra comunidad autónoma", ha explicado Clavero. También ha lanzado un mensaje de "tranquilidad" para la vertiente aragonesa que no se puede extender a la Comunidad Valenciana.
No obstante, el fuego continúa activo y se sigue trabajando con "intensidad" en la zona de la cabeza, ha subrayado. Los medios aéreos que se han incorporado a las tareas de extinción con la luz del día están centrándose en esta área "para intentar establecer un perímetro de control", ha apuntado.
Desde primeras horas de la mañana de este viernes hay un amplio operativo desplegado en las tareas de extición, integrado por más de 120 profesionales en la vertiente turolense. A las labores se han incorporado, según ha detallado el director general de Medio Medio Natural, Diego Bayona, tres helicópteros del Gobierno aragonés con sus cuadrillas helitransportadas, siete cuadrillas terrestres y seis autobombas también del Ejecutivo autonómico y los bomberos de la Diputación Provincial de Teruel. También se espera la llegada de tres cuadrillas BRIF (Brigadas de Refuerzos de Incendios Forestales) del Ministerio para la Transición Ecológica que actuarán sobre el terreno sin el apoyo de un medio aéreo.
Las previsiones meteorológicas para este mañana de viernes van a ayudar a los equipos que hay desplegados en la zona, pero por la tarde se espera un cambio en la dirección del viento ante el que hay que estar atentos. El aire se va a mantener soplando en dirección al oeste, pero el giro que se puede producir por la tarde, "no muy importante", podría "volver a complicar las intervenciones", ha alertado Clavero.
