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La reorganización de la Atención Primaria de Aragón se estrena entre dudas de los profesionales
Los centros redefinen sus agendas, elaboran un listado con voluntarios y demandan más información. Desde este miércoles se pueden abrir consultas de apoyo pero en el primer día funcionaron muy pocas.
La reorganización de las agendas de Atención Primaria para reducir la demora se estrenó este miércoles de manera desigual en los centros de salud y con dudas y críticas de los profesionales, que lamentaron la falta de tiempo para implantar las acciones anunciadas y demandaron más información. La Mesa Sectorial de Sanidad ratificó el 24 de febrero el preacuerdo de fin de huelga firmado con los sindicatos médicos Fasamet y CESM Aragón y, aunque el documento está pendiente de aprobación definitiva por el Consejo de Gobierno, determinadas acciones se podían poner ya en marcha.
Entre las medidas que entraron en vigor estaba la reducción de la carga burocrática y la limitación de las consultas por profesional –35 como máximo en Medicina de Familia, y 28 en Pediatría– así como la apertura de las denominadas agendas de apoyo cuando las demoras superen los tres días laborables. En estas agendas se atenderá a hasta 15 pacientes.
Pocos centros ofrecieron la consulta de apoyo. Entre los que abrieron agendas de refuerzo estaban Valdespartera (una para niños y otra para adultos) y Seminario (una con 10 pacientes). No obstante, según detallaron desde este último, la dirección del Sector II de Zaragoza les comunicó la suspensión, de momento, de esta consulta.
En todo caso, el profesional responsable del paciente podrá asumir de modo voluntario la atención independientemente de la limitación de citas y de acuerdo con las unidades de Admisión.
Médicos de varios centros coincidieron en que las direcciones de Atención Primaria les trasladaron la información a finales de la semana pasada y el plan "empieza con muchas dudas". "Es difícil –coincidieron– que de inicio funcione". Aún están pidiendo profesionales voluntarios para asumir esas consultas, que pueden ser del propio equipo o proceder de otros centros. "Falta tiempo para organizarlas", aseguraron. E incluso en algún ambulatorio se mantienen las citas programadas, que exceden el límite establecido.
Desde el Departamento de Sanidad aclararon que los centros todavía se están organizando e indicaron que desde este miércoles están habilitados para abrir una consulta de apoyo, pero eso no significa que se ponga en marcha de forma automática, porque depende de la demora, de que haya voluntarios... La Dirección de Atención Primaria remitió este miércoles a las direcciones médicas y de Enfermería de Atención Primaria y a las unidades de Admisión el procedimiento para la gestión de las citaciones en las consultas de apoyo al equipo.
Reclaman "otro modelo"
Para el presidente de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria en Aragón (Semergen), Ángel Vicente Molinero, esta batería de medidas "es una primera toma de contacto para paliar la situación" pero "a nivel nacional hay que afrontar de manera seria un cambio de modelo importante en Atención Primaria". "Hay que descartar la terminología ‘rebosamiento’ o ‘hueco’", en referencia a las consultas de apoyo, donde, según dijo, "se va a dejar mucho a la voluntariedad". "Hay muchos flecos sin resolver", recalcó.
En opinión de Izarbe Galindo, presidenta de la Sociedad Aragonesa de Medicina de Familia y Comunitaria (Samfyc), estos acuerdos "son cortoplacistas" y "pueden solucionar algún pequeño problema pero no son definitivos". "Debe haber –añadió– una mirada constructiva, todos los grupos políticos deben trabajar por la salud y la Atención Primaria y se tiene que pensar en una reestructuración más profunda". Leandro Catalán, presidente de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) de Aragón y también de Fasamet, reconoció que la limitación de agendas "conseguirá evitar la sobrecarga laboral" y junto a las consultas de apoyo en caso de demoras superiores a 72 horas "se puede lograr que el paciente sea atendido en tiempo y forma".
Hay que recordar que Fasamet y CESM Aragón instaron al Salud, un mes después de la firma del preacuerdo y a pocos días de la fecha acordada, a poner en marcha las medidas. Por ello, reflexionó que se tenía que haber planificado "con tiempo suficiente" para que el 1 de marzo "pudiera haber estado todo dispuesto".
Para la presidenta de la Asociación Aragonesa de Pediatría de Atención Primaria, Elena Javierre, la limitación de las agendas "implica que haya un tiempo de calidad para la atención al paciente" pero, dijo, aumentará las demoras. Las consultas de apoyo "solo se van a poder abrir si está garantizado que haya un médico que, de forma voluntaria, se haga cargo". "Y eso requiere una organización", apuntó. Señaló, además, que otra medida que habrá que abordar es la limitación de cupos.
