No quería ir contra nadie, ni pretendía caer en alusiones personales. Pero su apuesta por la regeneración democrática instando a los partidos a reforzar el pacto antitransfuguismo se volvió contra él cual bumerán, con innecesarios reproches que incendiaron el pleno de las Cortes. Estoicamente, y con clase, aguantó Daniel Pérez Calvo, coordinador de Ciudadano en Aragón, las críticas del parlamentario del PP Fernando Ledesma, que se esforzó en dejarle claro las diferencias entre el transfuguismo y el fuguismo. "Todos los que trabajan con Pérez Calvo se van. Es difícil encontrar a un diputado de su grupo que le defienda. Se fugan de usted, que solo busca atornillarse al sillón", le espetó.

Y se confirmaron las dudas que, de antemano, tenían en su grupo parlamentario, donde alertaron de que liberales y aragonesistas podían salir del debate escaldados.

El compromiso "ético y moral" que pretendía defender Pérez Calvo se vio mermado. Y eso que no entró al trapo de los reproches y dio la cara. Hasta cuando Ledesma le exigió que dejara claro si tenía cerrado un pacto con el presidente de la Comunidad. ¿Puede asegurar que no va a ser un tránsfuga de Javier Lambán?", le espetó, poniendo nombre y apellidos a la dirección general que podría recaer en el político liberal, "la cantinela que corre por la ciudad", dijo el popular acusándole de intentar atornillarse al sillón.

El coordinador de Cs en Aragón dejó claro que no tiene "ninguna oferta" del PSOE. "Es una pena que tenga que hacer méritos", le reprochó. Sorprendió en la Cámara, y mucho, la dureza de su intervención, con una agresividad que no se estila en el señorial palacio de la Aljafería.

Fotos del Pleno de las Cortes de Aragón

A las críticas de Pérez Calvo a Ledesma se sumó el socialista Darío Villagrasa, que recomendó a los parlamentarios del PP que "tengan cuidado con cuánta gente invitan a cenar a la peña a ver si luego los que pagan no van a tener sitio".

Había alertado Álvaro Sanz, de IU, de que no era un "debate oportuno" y no iba a ser "nada útil a sus intereses políticos. "Al final, no será Cs quien saldrá airoso, sino PP y PSOE". Y no erró en el tiro.

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Deslizó el portavoz del PAR, Jesús Guerrero, sin citar a ningún partido en concreto, que hay quien se va reuniendo con alcaldes del PAR "prometiendo el mismo cargo a nueve personas". "Eso es mentir", criticó. Respondió el del PP cargando contra el "cuatripartito de éxito", cebándose con el presidente aragonesista. "Si triunfa la moción de censura, ¿este se acabará convirtiendo en tránsfuga?, ¿le va a cesar Lambán?, ¿el gobierno de Lambán va a estar en manos de un tránsfuga? El señor Aliaga busca atornillarse al sillón de la vicepresidencia de la DGA", aseguró. " Me das asco", se escuchó de fondo al líder aragonesista, que señaló a Ramón Celma para avisar que él era quien se reúne con los alcaldes del PAR.

Les recordó Javier Sada, presidente de las Cortes, que lo que se dice en el arco parlamentario queda por escrito.

Villagrasa inició su intervención advirtiendo que no iba a "tirar el prestigio personal y profesional de nadie por el suelo, como Ledesma ha hecho". Recordó al popular que Jorge Azcón gobierna en Zaragoza gracias al apoyo de seis concejales de Cs. "No es un partido de fiar ni con el que coaligarse", les espetó. Y comparó al PP con el "tragabolas". "Jorge Azcón está abierto al talento. Esto es cambio de chaqueta. Donde no llegan los proyectos, llegan otras circunstancias que conocerán bien", le reprochó. Criticó el "transfuguismo moral" y defendió a Pérez Calvo y a Aliaga. "Sigan por su camino y nosotros a trabajar. No se rían tanto. Ya verán el 28 de mayo lo que deciden los ciudadanos", zanjó.