Bordar está de moda: la zaragozana que enseña los mejores trucos en TikTok

Natalia Perezgrueso, diseñadora gráfica y fotógrafa, se define como inquieta y creativa. Siempre había querido aprender a bordar y en 2019 se animó a hacer un curso online. Los conocimientos aprendidos en esta formación junto a las aportaciones de su madre le permitieron comenzar a bordar. Por aquel entonces, esta joven zaragozana ya contaba con un canal de Youtube y un perfil de Instagram (@venticatorce_estudio) en el que compartía sus trucos como fotógrafa. “Llegó la pandemia y comencé a bordar muchísimo más y me encontré en el mismo punto: quería resolver ciertas dudas pero me encontraba con que era muy complicado encontrar información”. Una vez halló las respuestas, decidió compartirlas con otros que se encontraran en su misma situación. “Fue ahí cuando decidí transformar mis redes sociales y pasé de la fotografía al bordado”, explica Natalia.

Después vino el salto a TikTok (@ventinat), donde ya le siguen tantas personas como en Instagram (más de 2.000). Y aunque ambas plataformas comparten un mismo fin, dar visibilidad a la técnica del bordado, “los contenidos en TikTok están más dirigidos a la práctica como tal, mientras Instagram lo utilizo más a modo de escaparate. De hecho, este es mi canal de venta principal”, señala refiriéndose a los encargos que recibe.

El éxito alcanzado por algunos de esos vídeos de carácter práctico en TikTok sorprendió a la zaragozana. Destaca el de cómo enhebrar una aguja para ‘Punch Needle’ (técnica de bordado en relieve), con más 100.000 reproducciones. 

Otros que también han triunfado son el de herramientas indispensables para bordar a mano y cómo colocar la tela en el bastidor, ambos muy útiles para quienes desean iniciarse en el bordado, a los que aconseja nada más que “tener paciencia y hacerlo con calma, estando presente en lo que se está haciendo”.

Bordar como terapia

Natalia, a la que le encanta bordar animales “por el fuerte vínculo que existe entre una persona y su mascota”, intenta siempre, a través de sus obras, transmitir sentimientos, historias que tengan un hilo conductor.

Más allá de los encargos que recibe, deja claro que en su tiempo libre borda porque para ella es “muy terapéutico, me aporta mucha tranquilidad. El sonido de cuando la aguja atraviesa la tela y cuando vuelve a entrar atravesando todo el hilo me resulta muy relajante”, confiesa.

En estos tiempos de prisas e inmediatez en los que vivimos, lo artesanal, lo que requiere de un tiempo y un proceso, es cada vez más valorado. De ahí se explica el auge experimentado por la cerámica, la costura o el bordado. “Lo que demuestra que estamos comprendiendo que no podemos estar corriendo 24/7”, señala. Considera, además, que detrás del resurgir de estas técnicas está el hecho de que “cada pieza u obra es diferente, y al mismo tiempo, porque es algo que disfruta tanto la persona que lo realiza como quien lo recibe”.