La presión asistencial sigue alta y las urgencias se contienen en Aragón
La situación comienza ya a normalizarse y los hospitales reabren las camas cerradas en Navidad.
La presión asistencial se mantiene todavía elevada en Aragón aunque tiende a normalizarse tras unas semanas marcadas por picos de saturación en las Urgencias hospitalarias, en los Puntos de Atención Continuada y en las consultas de los centros de salud después de los puentes festivos de Navidad, por el cierre de camas (una medida habitual en estas fechas), las vacaciones del personal sanitario y el aumento de patologías respiratorias.
Un cúmulo de circunstancias que provocó largas esperas en las Urgencias de hospitales como el Miguel Servet o el Royo Villanova, donde se registraron jornadas con decenas de pacientes pendientes de subir a planta, una gran demanda de atención en los Puntos de Atención Continuada, que atienden las urgencias fuera del horario de consulta de los centros de salud, y agendas sobredimensionadas de los médicos de Familia. Ante el colapso de estos servicios, Sanidad trasladó el pasado lunes su confianza en que la situación se fuera normalizando a lo largo de esta semana.
Fuentes de la Consejería informaron este miércoles de que en el Royo Villanova la situación había ido mejorando respecto a días anteriores. El martes se registraron 157 en el servicio de Urgencias de este centro zaragozano. En el Miguel Servet, el hospital más grande de Aragón, ese mismo día se produjeron 551 asistencias, cifras más contenidas que las de jornadas pasadas. Como referencia, la media diaria de urgencias atendidas en este centro en enero de 2019 (antes de la pandemia) fue de 556. En todo caso, avanzaron desde el Departamento de Sanidad, "la presión asistencial es elevada", de manera que se mantienen las medidas que se adoptaron ya los días previos, como la agilización de las altas o el traslado de enfermos a otros centros, como el Hospital General de la Defensa o el San Juan de Dios. Los hospitales aragoneses van recuperando la normalidad tras la Navidad con la apertura de las camas que se inhabilitaron durante esta dos semanas. En concreto, se cerraron hasta 257 plazas. También se retoma el ritmo habitual de la actividad quirúrgica programada.
En Teruel, el hospital Obispo Polanco registra un altísimo nivel de ocupación, según informaron este miércoles fuentes sanitarias, si bien, al menos por ahora, los pacientes que llegan a Urgencias y necesitan ingresar en planta lo hacen sin mayor dilación, indicaron las mismas fuentes. No obstante, los cuadros catarrales y las infecciones respiratorias están elevando la presión asistencial y la cifra de ingresos en el hospital.
