El parque tecnológico ligado a Amazon en Villanueva de Gállego se licitará en 2023
Soro sacará a concurso la urbanización de las 65 hectáreas antes de elecciones por 10,5 millones y estará lista en 2024 para atraer empresas TIC como se hizo gracias a Opel e Inditex en los sectores del motor y la logística.
La urbanización del polígono tecnológico con el que la DGA pretende aprovechar la implantación de Amazon Web Services (AWS) para impulsar el sector tecnológico ha iniciado su cuenta atrás. La sociedad pública Suelo y Vivienda de Aragón (SVA) cuenta con los preceptivos proyectos de reparcelación y urbanización de las casi 65 hectáreas de su propiedad junto al aeródromo de Villanueva de Gállego, cuyas obras se licitarán antes de las elecciones del próximo año con un coste próximo a 10,5 millones de euros.
El consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, cumplirá así su palabra y hará posible que la Comunidad disponga de cuatro parcelas de entre tres y doce hectáreas para atraer empresas del sector de las tecnologías de información y comunicación (TIC). Su situación será estratégica, junto a uno de los tres centros de datos que ha construido AWS, con la pretensión de aprovechar su tirón, como ya ocurrió en Irlanda, el primer emplazamiento europeo de la división tecnológica del gigante estadounidense del comercio electrónico.
Soro asegura a este diario que el presupuesto del próximo año, en su última fase de elaboración, contará con una partida suficiente para licitar el contrato de urbanización e iniciar las obras en el próximo otoño. Con este dinero, Suelo y Vivienda de Aragón podrá activar todo el procedimiento a principios de año, aunque la transferencia tarde unas semanas hasta que realmente esté operativo el presupuesto de 2023. "La cuantía será la necesaria porque queremos ejecutar los primeros trabajos en el último tramo del año", insiste.
La multinacional ha completado su primera fase de implantación y antes de que acabe el año pondrá en funcionamiento sus instalaciones de Zaragoza (Villanueva de Gállego y El Burgo de Ebro) y Huesca (Walqa). La DGA se comprometió por escrito a habilitar este parque tecnológico y el plazo expira a finales de julio de 2025. Aunque se dispone de un plazo de 32 meses para cumplir lo acordado, Suelo y Vivienda necesitará seis para licitar y resolver la adjudicataria y otros 18 para urbanizar los suelos, por lo que el colchón para iniciar el procedimiento se limita a poco más de medio año.
El consejero de Vertebración del Territorio evidencia que con la licitación en el primera tramo de 2023 se estará en disposición de cumplir "con suficiente holgura". No obstante, subraya que lo importante es disponer del suelo para aprovechar la oportunidad de contar con una compañía de referencia en su sector que haga de efecto tractor, como en su día se hizo gracias a General Motors con las auxiliares de la automoción y luego Inditex con el sector logístico.
El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) indicó que el parque no requería de una tramitación ambiental estratégica, ya que su impacto fue evaluado con el fallido plan parcial del parque industrial aeronáutico. Esto ha simplificado la documentación ambiental y ahorrado plazos.
El primer paso ya se ha dado con la construcción del centro de datos de AWS, que ocupa 117.699 metros cuadrados del futuro parque, puesto que se ha encargado de ejecutar la rotonda que regulará el tráfico de acceso desde la carretera de Castejón de Valdejasa (la autonómica A-1102). Además, ha asumido las conexiones con los sistemas generales de servicios urbanos, que servirán también para el resto del futuro polígono: el suministro de agua potable desde el casco urbano de Villanueva, el colector de saneamiento que desagua en el polígono de San Miguel y la conexión eléctrica.
Las parcelas
El resto le corresponderá a la sociedad pública, que va a urbanizar cuatro parcelas lucrativas de gran tamaño, de entre 27.385 y 118.889 metros cuadrados. La pretensión es compatibilizar la atracción de empresas del sector TIC con otras relacionadas con la aeronáutica, para lo que también habilitará otras cinco pequeñas superficies anexas a la pista de aterrizaje, de entre 4.240 y 7.190 metros cuadrados. Además, se habilitarán otras dos reservadas para futuros hangares, de 3.000 m2 cada una.
Su propiedad será compartida con el Ayuntamiento de Villanueva de Gállego, al que se le cederá el 15% de los aprovechamientos, tal y como se estableció en el protocolo sellado entre las partes hace ahora dos años. Esto se traducirá en tres parcelas que suman una superficie de 55.750 m2.
Eso sí, la factura de preparar todas las parcelas (271.813 m2), construir los viales (69.044 m2), acometer las infraestructuras (1.986 m²) y urbanizar las zonas verdes (70.311 m2) corresponderá íntegramente al Ejecutivo autonómico, aunque igualmente se cederán al municipio.
