Las primeras reacciones al proyecto de Presupuestos Generales del Estado desde los partidos aragoneses no pudieron ser, como es habitual, más dispares. Mientras la coalición de gobierno defendió las cuentas por "reforzar el estado de bienestar" y mejorar las partidas para la Comunidad respecto al ejercicio anterior, la oposición cargó duramente contra el bloqueo o retraso en algunas de las obras más demandadas.

La diputada socialista Susana Sumelzo destacó que "estos presupuestos permiten avanzar en justicia social, son para la mayoría de los aragoneses". La zaragozana recordó que "los ayuntamientos recibirán un 5% más" y que, "en momentos difíciles y de crisis, el Gobierno apuesta por fortalecer el estado bienestar".

Un discurso similar al expresado por el portavoz de Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, que recordó que "la inversión en Aragón aumenta un 4,8 %», así como su peso relativo en el conjunto de territorios (pasa del 4% al 4,1%). Además, la Comunidad recibirá en 4.429 millones del sistema de financiación autonómica, un 24,8% más. «De estos datos, se puede concluir de forma objetiva que el Gobierno de coalición sigue tratando bien a Aragón en términos cuantitativos", apuntó.

Una visión muy distinta apuntó Eloy Suárez, diputado del PP por Zaragoza. "Son unos presupuestos deprimentes para Aragón. Ni un solo proyecto nuevo, y se retrasa la mayor parte de los que están en ejecución", denunció. Se mostró "muy preocupado por la caída de 30 millones en Transición Ecológica" y criticó el retraso de las obras de la A-68.

Criterios de población

Por su parte, Daniel Pérez, coordinador de Cs en Aragón, reprochó que aumenta la inversión en Aragón "pero menos que en aquellos territorios más poblados, lo que evidencia una apuesta por criterios de población y no de necesidades". No se agilizan proyectos de inversión cuya ejecución está siendo lenta. Estos presupuestos se basan "en financiar la campaña electoral más cara y larga de la historia", una visión compartida por Suárez.

Desde CHA consideraron que el aumento de la inversión es "mínimo" y "claramente insuficiente". Su presidente, Joaquín Palacín, estimó que en relación a la superficie de todo el Estado "nos quedamos más lejos todavía, a más de la mitad de lo que nos correspondería a Aragón por nuestro territorio". La cifra, además, "no llega ni a la mitad tampoco de la cifra de 1.300 millones de inversión en 2008. Último año, por cierto en el que el voto de CHA contribuyó a esa cifra, tras un acuerdo con el Gobierno", advirtió.

Desde Vox y PAR declinaron valorar las cuentas a la espera de un estudio más exhaustivo. En cuanto al portavoz de Teruel Existe, Tomás Guitarte, criticó que la cuantía prevista para su provincia es "insignificante", reclamó partidas para los compromisos adquiridos con su formación y advirtió de que la aplicación de las ayudas al funcionamiento de las empresas son una "línea roja" para apoyar los presupuestos.