ola de calor

Las muertes por calor en Aragón aumentan en las últimas décadas

El incremento de las temperaturas en el verano de 2003 se cobró diez vidas en la Comunidad.

La plaza de Basilio Paraíso, durante la ola de calor de 2003.
La plaza de Basilio Paraíso, durante la ola de calor de 2003, con 46ºC en el termómetro.
Oliver Duch

En tan solo cinco días han fallecido 16 personas en Aragón por causas atribuibles al exceso de temperaturas, 345 en el resto del país durante el mismo periodo. Estos números se extraen del estudio elaborado por el Instituto de Salud Carlos III, vinculado al Ministerio de Sanidad, y que se nutre de las estimaciones de excesos de mortalidad que se relacionan con el exceso de temperatura, datos de Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Cada verano, y más ante los episodios de ola de calor, se insiste en la prevención, en especial se pone el foco en las personas mayores o con patologías, que la canícula puede agravar. Si se echa un vistazo a la hemeroteca se puede comprobar que en los últimos 30 años la historia se ha repetido.

Uno de los ejemplos fue el 23 de julio de 1995 se registró el fallecimiento de dos personas en Zaragoza por el aumento de la temperatura y otros tantos en Córdoba. Esos datos se sumaron a los otros 18 que se habían contabilizado hasta ese momento en todo el país, la mayoría en Aragón, Andalucía y Madrid. Finalmente la cifra aumentó y solo en Andalucía perecieron 24 ciudadanos. La ola de calor de ese año fue algo generalizado en todo el planeta, tanto que en Estados Unidos murieron 700 personas por este motivo.

Recorte de HERALDO de la ola de calor de 1995.
Recorte de HERALDO de la ola de calor de 1995.
Archivo Heraldo de Aragón
Recorte de HERALDO de las muertes por ola de calor en 2003.
Recorte de HERALDO de las muertes por ola de calor en 2003.
Archivo Heraldo de Aragón

Otra de las olas de calor que más se recuerdan en España y en toda Europa fue en 2003, muestra de ello es que el balance de muertos en Francia se incrementaba día a día hasta superar los 5.000. Hasta la segunda quincena de agosto habían fallecido en España 46 personas.

En total en la Comunidad murieron una decena de personas, que ya tenían patologías crónicas, siete de ellas fueron entre el 1 de julio y el 18 de agosto, mientras que las tres últimas entre el 21 y el 31 de agosto. No obstante, en este recuento no se incluyeron los muertos por hipertemia o golpe de calor, a los que se atribuyeron, al menos, el caso de un hombre de 63 años que falleció en su casa de la avenida de Goya y un trabajador FCC de 38 años que permaneció 20 horas hospitalizado en la UCI. En cualquier caso, estas cifras contrastaban con el aumento de defunciones en Aragón, que fueron más numerosas: casi un 30% más en Zaragoza y un 24% en Huesca. En Teruel se mantuvieron similares.

Al año siguiente, en 2004, en todo el país se confirmaron 26 fallecimientos a causa del calor, ninguno de ellos en Aragón.

Según el estudio del Instituto de Salud Carlos III, en lo que va de 2022 ha sido el año que se estima que se han producido más muertes atribuibles a la temperatura –tanto por frío como por calor-: 210 en Aragón. Le sigue 2019 con 192 fallecimientos, 154 en 2021, 149 en 2017 y 144 en 2015.

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