defensa
El Hospital San Juan de Dios de Zaragoza se suma a la recuperación de los heridos ucranianos
Este centro dispone de una unidad de rehabilitación muy avanzada tecnológicamente.
El Hospital San Juan de Dios de Zaragoza va a ofrecer rehabilitación a varias víctimas ucranianas en la guerra, que fueron intervenidas en el Hospital General Militar.
El primer paciente en estrenar este servicio ha sido un hombre que recibió un disparo por la espalda, y que ha sido trasladado a la Unidad de Rehabilitación del San Juan de Dios. El militar, de 41 años, presentaba lesiones en la columna y en la médula espinal. En los próximos días, el San Juan de Dios espera que sean derivados otros heridos.
Este será el principio de una colaboración estrecha con un equipo de profesionales multidisciplinar integrado por médicos rehabilitadores, internistas, neurólogos, neurofisiólogas, logopedas, enfermería especializada, fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales. La directora del San Juan de Dios, Carmen Vicente, señala que la propuesta se hizo al general del Hospital Militar, Juan Antonio Lara, para llevar a cabo el proceso de rehabilitación con sesiones de fisioterapia en el gimnasio.
Entre sus medios, disponen de dos espacios dotados con robótica, 'software' de realidad virtual y domótica, entre otros, que convierten la Unidad de Rehabilitación y Neurorrehabilitación en un servicio referente y altamente avanzado.
Dos casos de maxilofacial operados en el Servet
Entre los 22 ucranianos que están recibiendo cuidados en Zaragoza, dos de ellos (una mujer y un hombre) han sido intervenidos por el departamento de Cirugía Oral y Maxilofacial del Miguel Servet de las graves heridas que sufrían en la cara por la metralla.
La jefa del departamento, Victoria Simón, explica que la intervención al hombre, en la que hubo que reconstruirle la nariz como consecuencia de un disparo, se prolongó por espacio de 18 horas, en ella participaron cuatro cirujanos y dos residentes del Servet y del hospital Juan XXIII de Tarragona, que colaboraron en la “laboriosa” tarea. Los expertos en maxilofacial utilizaron unas placas de titanio y una prótesis realizada con tejido de otras partes del cuerpo. “Es un reto para nosotros porque no es habitual este tipo de operaciones”, recalcó.
Respecto a la mujer, que también precisa atención maxilofacial, oftalmológica y cirugía plástica, la jefa del departamento detalla que ha sufrido una fractura en la cara por el efecto de la metralla, pero la atención realizada era “por un problemas estéticos”. Simón señala que se realizará un seguimiento personalizado de las intervenciones a los dos heridos.
