Fran Soriano: el culturista maño que ha cumplido sus sueños en Estados Unidos

El zaragozano de 36 años, Míster Universo NABBA 2007, reside en Los Ángeles donde regenta su propia inmobiliaria y convive con su pareja.

Fran Soriano, en Los Angeles.
Fran Soriano, en Los Angeles.
Heraldo

Francisco Soriano Rodríguez nació hace 36 años en el barrio Jesús pero jamás se imaginó que iba a acabar viviendo al otro lado del charco. Eso sí, reconoce que siempre soñó con vivir fuera de España. “Era algo que siempre tuve claro desde niño”, admite. Hoy, el culturista maño reside en Los Ángeles con su pareja, Maureen Blanquisco, actual campeona de Boston Pro y una de las favoritas de Miss Olimpia 2022 en la categoría bikini; y donde regenta su propia inmobiliaria.

Con más de 40.000 seguidores en Instagram (@spanishfransoriano), el zaragozano comenzó muy joven en el mundo del culturismo. “Cuando estudiaba en el Pilar Lorengar, en el barrio de La Jota, un día me vi metido en una pelea y no me supe defender. Decidí que quería estar muy fuerte para que no me volviera a pasar”, relata. Claro que, por aquel entonces, apenas tenía 11 años.

Asegura que su crecimiento en redes sociales fue totalmente accidental: "Nunca entró en mis planes. De hecho, cuando empecé en este mundillo de manera profesional apenas existían". Hoy, no solo colabora con diversas marcas de ropa o suplementos sino que, además, interactúa con jóvenes y amantes del fitness que lo ven como inspiración. "Recibo muchos mensajes de españoles que también me preguntan por mi aventura al salir del pais y empezar de cero", asevera. 

En su opinión, el simple hecho de servir de inspiración a alguien de cualquier parte del mundo con un solo click ya es muy emocionante.

El segundo de cuatro hermanos, admite que fue “muy mal estudiante”. “Comencé a estudiar electricidad en el Santo Domingo de Silos, y aunque no terminé, pronto encontré trabajo como electricista. Eran otros tiempos”, bromea. Fue al cumplir 14 cuando su padre le regaló la matrícula al gimnasio del barrio por Navidad: El Apolo, en el barrio de La Jota. Algo que le cambió la vida. “La verdad es que por aquel entonces no íbamos muy holgados en casa, así que me lo tomé muy en serio”, admite.

Fran Soriano ha triunfado en el mundo del fitness.
Fran Soriano ha triunfado en el mundo del fitness.
Heraldo

En un momento en el que sentía que no destacaba en nada en concreto, el deporte se convirtió en una válvula de escape y, muy pronto, en una opción para poder viajar. “Con 18 años participé en mi primera competición de culturismo, fue en 2004, en Madrid”, rememora. Ese año se hizo con el Campeonato de España y la Copa Junior, se convirtió en Mr. Olympia AEFA -uno de los premios más prestigiosos del sector del fitness en todo el mundo- y quedó tercero del Mundo en el campeonato NABBA en Grecia. “También quedé en tercer puesto en Míster Universo NABBA, cita que organiza la Asociación Nacional de Culturistas Aficionados”, asevera.

En 2007 ganó de nuevo el campeonato del Mundo -esta vez en Rusia- y la copa de España, y queda primero en Míster Universo NABBA donde hizo historia al ser el primer atleta en su clase en ganar dos Campeonatos del Mundo en el mismo año. Sin embargo, al tratarse de un deporte minoritario, no lograba sacar lo suficiente para vivir de ello. Y todo el dinero que ganaba, lo tenía que invertir en nuevas competiciones. Por eso, tras concatenar varios empleos, entre personal de seguridad, trabajos como electricista y reparto de prensa, con la llegada de la crisis económica de 2008 se quedó, de repente, sin nada.

“Reconozco que, como deporte, no es la mejor opción. Es muy sacrificado y hoy en día está mal entendido. Defiendo el culturismo sano, el que se sustenta en una dieta sana y se basa en hacer ejercicio físico, pero, sobre todo, con cabeza”, reflexiona. ¿Lo más importante? No obsesionarse: “Para mí es uno de los deportes más bonitos que existen”.

Fran Soriano.
Fran Soriano.
Heraldo

En busca del sueño americano

“Coincidió con que me llegó un mensaje de un fotógrafo en Los Ángeles, en Estados Unidos, que me proponía viajar para allá y hacer unas sesiones de fotos. Era el momento perfecto y no tenía nada que perder”, afirma. Era noviembre de 2009, no hablaba inglés ni conocía nada acerca de aquel lugar. Así comenzaba su particular búsqueda del ansiado “sueño americano”.

“Tenía 23 años, pero no tenía miedo a nada”, admite. La suerte hizo que se topase en su vida con el que considera su mentor, el constructor Harold Gordom Nelson, quien le dio trabajo, de nuevo, como electricista: “Recuerdo que cuando le conocí le dije, 'Quiero ser culturista', y me respondió; 'Primero búscate un trabajo que te dé de comer'”. Gracias a él comenzó a estudiar inmobiliaria en 2015 y, al fallecer este, en 2016 abrió su propia agencia, HGN, en honor a Harold.

"Entrar en elsector inmobiliario fue algo que nunca pensé hasta llegar a USA", explica. Cuando reunió algo de dinero, compró un edificio de 12 apartamentos: "Surgió una gran oportunidad y no lo pensé". Tras reformarlo, logró que la propiedad se revalorizase. "Logré reunir lo suficiente para refinanciarlo y poder comprar otro, y asi seguí. Hoy gestionamos el manteniento de esas propiedades", señala.

“En todo este tiempo había dejado de competir, mi vida había cambiado demasiado, pero en 2018, animado por el que hoy es mi entrenador, Francisco Espín, decidí prepararme y volver. Fue un auténtico desastre”, admite, entre risas. Sin embargo, decidió ponerse las pilas, recuperando puestos como finalista en 2018. “Este año ya me he quedado a las puertas de la tarjeta profesional, y esto no ha hecho más que empezar”, advierte.

Un viaje de ida… ¿y vuelta?

Tras más de 13 años en Estados Unidos, el zaragozano asegura que, tarde o temprano, confía en volver a casa. “Zaragoza es mi casa. En Aragón están mis raíces y mi corazón, así como mi familia y grandes amigos”, asevera. De hecho, la covid retrasó un posible plan de volver a España, pero no le ha disuadido de su decisión.

Eso sí, mientras tanto, intenta que sus orígenes queden claros allá por donde va. “En mi coche siempre hay música española, llevo una cinta del Pilar con la bandera de España y todos los que hablan conmigo me dicen que el acento no lo he perdido a pesar del paso del tiempo”, asevera.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión