"En Galvasa el precio del gas se ha cuadriplicado"
El consejero delegado de la empresa ha anticipado que "lo peor es que va a durar".
Galvanizaciones Aragonesas (Galvasa) es otra de las empresas que se está viendo "tremendamente afectada" por la subida de los costes energéticos, según reconoció su consejero delegado, Gerardo Mene.
"Tenemos el megavatio de gas referenciado al barril de petróleo Brent, pero aún así hemos pasado de unos 14 euros que costaba el megavatio hora antes de todo esto a los 140 de este enero o los 215 euros de febrero" con lo que eso implica, precisó, "cuando tienes un horno de 710 toneladas de zinc fundido electrolítico a 450 grados de temperatura de proceso". Si a eso, añadió, suma tener en sus instalaciones de Malpica, puentes grúa elevadores hidráulicos y motores de aspiración con consumos elevados de luz, la factura se dispara y "lo peor", anticipa, es que "va a durar". Lo único que pueden hacer, indicó, es "ir aplicando a su vez subidas de precio" a los clientes porque "el horno no lo podemos parar".
En esta firma de galvanizado fundada en 1972, que emplea a unas 80 personas, facturan por tonelada de zinc galvanizado que luego emplean sus clientes en torres eléctricas, instalaciones fotovoltaicas, báculos de alumbrado público o líneas de ferrocarril.
"El mayor problema es la incertidumbre que existe. A los precios actuales de la energía, a proveedores nuestros como Glencore en Asturias no les sale a cuenta producir la electrólisis (uno de los procesos finales de la producción de zinc) y eso puede llevarnos a tener problemas de suministro", advirtió el responsable de Galvasa, que aseguró que pese a todo van a mantener la actividad.
Haber sido previsores y tener acopio de material de zinc comprado a los precios de antes les ha permitido atender todos los pedidos y también disponer de un contrato cerrado del precio de electricidad aunque, puntualizó, "la empresa nos lo rompió unilateralmente en junio porque dijeron no lo iban a poder mantener con las subidas ya de septiembre y octubre". Ahora, la guerra en Ucrania les ha supuesto un incremento cercano al 80% en el precio del zinc, que como otras materias primas, indicó, está sujeto "a variaciones bruscas en un mercado muy nervioso".
