Mañana por la tarde Melchor, Gaspar y Baltasar regarán de ilusión las calles de todos los rincones de Aragón. Los tres sabios y sus comitivas no repartirán caramelos (ya se sabe, son tiempos de covid) pero sí saludarán a los chavales que se aposten en las calles para ver pasar magos, hechiceros y danzantes. Como es tradición, de sus carrozas asomarán algunos de los regalos que tienen previsto repartir por la noche. También desfilarán los buzones mágicos y reales para que los niños más rezagados depositen sus cartas y un pequeño vagón con carbón que recordará a la chavalería que han de ser buenos durante todo el año.

El emisario de los Reyes Magos llegó ayer a Zaragoza para supervisar todos los detalles de la cabalgata y aseguró que “habrá novedades y sorpresas” pero no pudo contar más porque “si se dice el secreto, se pierde la magia”. Recién llegado de Oriente, el embajador pidió a los niños aragoneses que no hagan muchas trastadas y que se preocupen por conocer a Sus Majestades de Oriente, que están ávidas de transmitirles su sabiduría. Melchor llega rodeado de oro desde Persia y encabezará la comitiva a golpe de gong; Gaspar desfila entre bailarinas que evidencian su origen indio y Baltasar procedente de la tierra de los faraones llegará con una barca de tradición egipcia.

Este 2022 junto a los Reyes también desfilarán una serie de voluntarios que irán repartiendo mascarillas a los asistentes a la cabalgata. La vicealcaldesa de Zaragoza, Sara Fernández, recomienda que las lleven puestas todos los asistentes al desfile, incluidos los niños menores de seis años. También todo el séquito llevará mascarilla, que solo se podrán retirar momentáneamente aquellos músicos que interpreten instrumentos de viento.