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Marlaska no avisó a la Audiencia Nacional de la llegada de Gali hasta 5 días después de que entrara a España por la Base
La jefa de gabinete de Interior y la exjefa de Presidencia declaran como testigos por videoconferencia en el Juzgado de Instrucción 7 de Zaragoza
La jefa gabinete del Ministerio del Interior, Susana Crisóstomo, ha declarado este viernes ante el juez Rafael Lasala, titular del Juzgado de Instrucción 7 de Zaragoza, que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le comunicó el viernes 23 de abril (cinco días después de la llegada del líder del Frente Polisario, Brahim Gali, a la Base Aérea de Zaragoza) que debían trasladárselo a la Audiencia Nacional, donde tenían abiertos dos procesos judiciales. Esa comunicación debía realizarla junto al entonces jefe de gabinete de Exteriores, Camilo Villarino, investigado por esta causa con la exministra Arancha González Laya.
La declaración de Cristóstomo se ha realizado por videconferencia en la sala 11 de la Ciudad de la Justicia, desde un juzgado de Madrid, desde donde también prestó declaración la exjefa de gabinete de Presidencia, María Isabel Valldecabres. Han estado presentes en la sala de Zaragoza, el letrado Antonio Urdiales, y la abogada del Estado, María del Mar González Bella, con el juez Rafael Lasala, y el fiscal Juan Pablo Fraj Lázaro.
En su testimonio, la jefa de gabinete de Interior ha negado que hubieran realizado gestiones sobre la entrada en España del líder polisario el pasado 18 de abril, de la que se encargaron desde el Ministerio de Asuntos Exteriores, según informaron fuentes jurídicas. "En función de si el día 23 de abril se conocía el motivo judicial de Gali o no podemos acabar reclamando que presté declaración como testigo el ministro Grande-Marlaska", ha señalado Antonio Urdiales, letrado de la acción popular. "¿Había información ese día sobre que se seguían procesos judiciales a Gali? Esta es la cuestión a dilucidar", ha manifestado a HERALDO después de los testimonios por videconferencia.
La jefa de gabinete de Interior ha precisado que habló con su compañero de Exteriores, Camilo Villarino, (quien ya había manifestado que hablaron el 23 de abril) sobre el hecho de comunicar la llegada de Gali al Hospital de Logroño a la Audiencia Nacional. También ha precisado que se coordinaron en la salida del líder del Frente Polisario desde España (el aeropuerto de Pamplona) a Argelia el 1 de junio.
El juez Rafael Lasala investiga la entrada de Brahim Gali a España para que le trataran porque estaba muy enfermo de covid y el Gobierno decidió hacerlo de manera discreta, a través de un avión del Gobierno de Argelia, para evitar un conflicto con el Gobierno de Marruecos. La crisis de la entrada en Ceuta de unos 10.000 marroquíes se produjo posteriormente como consecuencia de esta operación con Gali.
Urdiales le ha cuestionado a la jefa de gabinete si conocía la historia de Brahim Gali pero ella ha negado que lo conociera antes y no mantuvo conversaciones con el ministro Grande-Marlaska sobre el líder del Frente Polisario. Su nombre le sonaba porque fuera responsable del Polisario que iba en una patrulla que fue atacada con drones unos días antes por parte de Marruecos.
En su testimonio, la exjefa de gabinete de Presidencia, María Isabel Valldecabres, ha manifestado que la entonces vicepresidenta Carmen Calvo le solicitó que pudieran conocer a las diez de la noche del 15 de abril (tres días antes del viaje de Gali) si iba a autoirzarse la entrada del líder saharaui en España y por eso llamó a Camilo Villarino, que esa noche no lo conocía.
Pero al saberlo, Valldecabres se lo comunicó a la ministra de Presidencia, sin que se prolongara más la conversación. Ha agregado que la ministra "no estaba bien informada" y le preguntó a ella de manera "dubitativa", pero quería conocer si el Gobierno iba a permitir su entrada en España. "Sobre la petición de declaración de Carmen Calvo ya veremos si la pedimos para ver si podemos sacar algo de su testimonio", ha agredido Urdiales.
