¿Y si Robin Hood estuvo en Alfajarín y no en Sherwood?
La Asociación Deportiva Alfajarín de Tiro con Arco lleva en marcha desde 1985; al frente está Marcelino Ibáñez, pionero de la especialidad en Aragón y apasionado de un deporte que sigue ocupando buena parte de su ocio. Además, se encarga de transmitir sus conocimientos a las nuevas hornadas de practicantes.
Puede decirse miedo a errar: Marcelino Ibáñez es un pionero del tiro con arco aragonés, y el impulsor de la Agrupación Deportiva Alfajarín de Tiro con Arco. "Bueno… sí puse el alma en la creación del club, que sigue siendo mi gran ilusión, y llevo ya un tiempo en este deporte; hace no tanto me dieron una placa por llevar medio siglo practicándolo oficialmente. Empecé a los 16 y era 1967, así que calcula".
Marcelino empezó a familiarizarse con la especialidad en el Stadium Venecia. "De ahí pasamos al Tiro Nacional, al lado del cementerio, ahora Tiro Zaragoza. Allá estaban Paquita Millán, Carlos Briceño… unos cuantos. Participé por primera vez en un campeonato de España en 1973, en Palma de Mallorca; los arcos eran entonces muy primitivos, aunque se tiraba a las mismas distancias; en tiro olímpico las dianas están a 30, 50, 70 y 90 metros. En sala (hay galería en Alfajarín) se tira a 18 metros".
La esposa de Marcelino, María Luisa Peiró, ya ha dejado las tiradas, pero es sin duda una de las deportistas más destacadas en la historia del club y también en el tiro con arco aragonés. "Fue cinco veces campeona de España, ganó en campo y en sala y también fue medallista en olímpico; ganó el Open de Lisboa por delante de una campeona del mundo… era buena técnicamente, y también muy fuerte mentalmente. Problemas de cervicales le llevaron a dejar el arco; continuó en el papel de jueza de competición, yo también me desempeñé como juez y ambos estuvimos en los Juegos Olímpicos de Barcelona en esa función, llevando además el campo de entrenamientos. Los más fuertes del mundo en arco olímpico son quizá los coreanos, seguidos de los estadounidenses; también son los mejores en arco compuesto. Los rusos también son buenos, este deporte es muy importante allá".
Acumular experiencias
Marcelino, electricista de oficio desde chaval y jubilado en la actualidad, también tiene tres títulos nacionales en su palmarés, logrados tanto en campo como en sala. "Con Nacho Catalán y Carlos Marcén ganamos el nacional en Marbella. En los 90 tuve mis mejores años competitivos; también recuerdo las citas en Las Vegas, ya he estado tres veces allá tirando, dos con buen papel en los 90 y hace apenas dos años con una visita junto a muchos compañeros de aquí, más como experiencia colectiva, y hemos tirado en Nimes varias veces".
El club tiene sus instalaciones en el monte, pasado el caserío local y cruzada la autopista. El club lleva 36 años en su localización actual; el escudo lo ha pintado Andrea, joven ilustradora y sobrina de Marcelino. "Aquí tenemos también un circuito de campo muy completo, con dianas a diferentes alturas, y otro de 3D con réplicas de animales; hay de todo, desde cocodrilos a leones u osos. Hacemos tiradas abiertas en grupos de cuatro, con inscripción la semana previa que vamos anunciando a las autoridades competentes y al servicio de Deportes de la DGA".
Viene anécdota. "Una vez nos pasó algo muy gracioso en tirada 3D. Hacemos un Open de ámbito nacional en el pinar que hay bajo el castillo; ahí hay un puente, junto a una zona muy verde, y colocamos el cocodrilo en ese punto, como si estuviera paseando por el campo. Es tan realista de lejos que un chaval que iba en bici lo vio desde el puente, le hizo una foto y fue a la Guardia Civil para denunciar que había un cocodrilo suelto. Cuando nos pidieron explicaciones, les abrí el almacén y les enseñé el cocodrilo, el león... ahí se aclaró todo".
Artículo incluido en la serie 'Aragón es Extraordinario'.
