calatayud
Reunión de seguridad para organizar el dispositivo que evite celebraciones por San Roque
Se incrementará el número de efectivos y el Ayuntamiento bilbilitano pide evitar celebraciones o reuniones de riesgo para que no lleguen restricciones.
El alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, ha mantenido a primera hora de este jueves una reunión de seguridad con los responsables tanto de la Policía Local bilbilitana como del Cuerpo Nacional de Policía en la ciudad, con el fin de diseñar el dispositivo que se pondrá en marcha entre el 13 y el 16 de agosto. En estos días que se celebrarían las fiestas en honor de San Roque se incrementará la presencia de las fuerzas de seguridad en calles, plazas, parques, zonas verdes y especialmente, en el entorno de fincas, con el fin de evitar celebraciones que generen un riesgo para la salud.
La organización de este dispositivo no se ha realizado en una Junta de Seguridad, como viene siendo habitual, pero el primer edil ha mantenido a su vez una reunión telemática con el subdelegado de Gobierno en Zaragoza para solicitar colaboración.
El regidor también estará mañana con las empresas concesionarias responsables de la limpieza y las zonas verdes, que por contrato realizaban actuaciones extraordinarias durante las fiestas, para que tengan a sus equipos preparados en el caso de que se requiera una intervención.
"En plena sexta ola de la pandemia en Aragón, la preocupación es máxima en las localidades que en circunstancias normales celebrarían sus fiestas patronales estas semanas", afirma el regidor. Así, ha insistido en que "ello ha motivado medidas para la limitación de la movilidad en otros municipios aragoneses, máxima que debemos evitar actuando con responsabilidad y, al igual que ocurrió el pasado año, prescindir de cualquier tipo de reunión social o celebración que pueda suponer un riesgo", ha subrayado Aranda.
Según los últimos datos, Calatayud registró el miércoles 14 nuevos contagios, se trata de la cifra más alta de nuevos infectados desde el pasado 20 de julio. A 7 días, la incidencia acumulada se sitúa en 288 casos por cada 100.000 habitantes, número que asciende hasta los 552 si se tienen en cuenta las últimas dos semanas. La evolución de estas cifras se encuadra en un diente de sierra, cuyo mayor pico se dio el 21 de julio, cuando la tasa se fijó en 657 casos por cada 100.000 habitantes.
