Asaja-Aragón estima pérdidas de 144 millones en el cereal de invierno por la falta de lluvias

Los cerealistas aragoneses comienzan a inquietarse. La ausencia de lluvia –no se esperan precipitaciones en las próximas cuatro semanas– y el anunciado incremento de las temperaturas –tras un fin de semana gélido– hacen temer por la evolución del cereal de secano, especialmente en las zonas más áridas.

Así lo ha advertido este lunes Asaja-Aragón que advierte de "graves pérdidas" en el cereal aragonés. Las cifras en unos 144 millones de euros, puesto que la primera valoración realizada por los servicios técnicos de la Una primera valoración realizada por los servicios técnicos de la organización agraria avanzan una producción de 1.750.000 toneladas para la campaña 2020/2021, una cifra significativamente inferior a las 2.550.00 toneladas recogidas el pasado año. Dicho descenso y teniendo en cuenta las cotizaciones actuales de esta producción, ha señalado el presidente de Asaja-Huesca, Fernando Luna, supondría una "acarrearía unas pérdidas económicas al complejo agroalimentario aragonés de entre 140 y 150 millones de euros".

Luna ha recordado que es cierto que el invierno que acaba de marcharse, dejó numerosos días con lluvia en la Comunidad, pero estas precipitaciones no dejaron suficiente tempero, "que ha sido muy superficial". Por ello, en aquellos cultivos en los que ya hay bastantes raíces, la subida de las temperaturas "va a ser más flagrante la falta de agua", insistió Luna, que recordó que los secanos cerealistas de Aragón "afrontan la época de mayores necesidades hídricas de la planta (marzo, abril y mayo) con pocas o nulas reservas en la zona radicular".

Las zonas áridas –sur de Huesca, centro de Zaragoza y norte de Teruel– son las que se enfrentan a mayores dificultades, ha explicado el representante de esta organización agraria. Y eso significa que alrededor de 300.000 hectáreas podrían resultar dañadas por la ausencia total de precipitaciones. Nada es irreversible, ha señalado Luna, pero ha reconocido que todas las previsiones meteorológicas que manejan los técnicos y responsables de Asaja-Aragón hablan de ausencia de precipitaciones en, al menos, las próximas cuatro semanas. "Cuánto más tarde en llover más difícil será recuperar la cosecha, con lo que las pérdidas podrían ser incluso mayores", ha puntualizado.