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La Audiencia ratifica la prisión para la pareja alemana que huyó de un control fronterizo

El tribunal altoaragonés basa su decisión en "la gravedad de las imputaciones que provisionalmente se les hacen", advirtiendo que su falta de arraigo en el territorio nacional "sugiere un alto riesgo de fuga".

Antigua Audiencia de Huesca de la calle Moya.
Antigua Audiencia de Huesca de la calle Moya.
Rafael Gobantes

La Audiencia de Huesca ha ratificado la orden de prisión provisional dictada contra una pareja de nacionalidad alemana que se saltó el pasado 20 de marzo un control establecido en el paso fronterizo del Somport (Huesca) y que protagonizó una fuga a lo largo de 70 kilómetros, hasta estrellarse contra una bionda en el municipio de Nueno. En su auto, al que ha tenido acceso Efe, el tribunal oscense ratifica la orden de prisión provisional dictada contra la pareja por la titular del Juzgado de Instrucción nº 2 de Jaca y desestima la petición de libertad de su letrado, tras aludir al riesgo de fuga existente.

La Audiencia altoaragonesa basa su decisión en "la gravedad de las imputaciones que provisionalmente se les hacen", advirtiendo que su falta de arraigo en el territorio nacional "sugiere un alto riesgo de fuga". Argumentan los magistrados que las penas a las que podrían enfrentarse los dos detenidos por los presuntos delitos de lesiones, daños, contra la seguridad vial y atentado, podrían situarse entre los 3 y los 15 años de prisión. "Además -subraya el auto judicial- se nos antoja que la instrucción y, por ende, el enjuiciamiento no se va a dilatar excesivamente en el tiempo".

Según el atestado policial, la pareja, que se desplazaba en un BMW de alta gama, esquivó el control policial establecido por la Policía Nacional en cumplimiento del protocolo de alerta activado por el coronavirus y emprendió una precipitada huida por la autovía A-23 en dirección a Huesca.

Tras colisionar contra un vehículo oficial que se interpuso en su camino, la pareja se adentró en el puerto de Monrepós a velocidades superiores a los 200 kilómetros por hora y generando situaciones de grave peligro para el escaso tráfico existente debido a las restricciones del estado de alerta por coronavirus.

A la altura de Nueno, a pocos kilómetros de la capital oscense, uno de los vehículos de la Guardia Civil consiguió adelantar al coche fugado y ponerse delante para obligarle a reducir la velocidad de la huida. En ese momento, la mujer embistió al vehículo que le cerraba el paso y maniobró hacia atrás, arrollando la moto de uno de los agentes que les perseguía, el cual pudo saltar instantes antes para evitar el atropello.

Uno de los agentes perseguidores aprovechó esta situación para efectuar dos disparos a las ruedas del vehículo en fuga, que perdió finalmente la dirección y se salió de la calzada tras chocar contra una bionda de protección. El letrado de la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), Jorge Piedrafita, ha expresado, en declaraciones a Efe, su satisfacción ante la decisión de la Audiencia de recoger en su auto los argumentos empleados por él mismo ante la instructora para instar la prisión provisional de la pareja.

Este letrado argumentó ante la magistrada que la gravedad de los sucesos registrados, junto al riesgo de fuga que se derivaba del hecho de carecer la pareja de domicilio y de medios económicos en España aconsejaban la medida solicitada. Piedrafita ha expresado su decisión de ejercer "una acusación firme y vigilante para lograr la pena máxima ante unos hechos que ocasionaron lesiones y daños graves a tres servidores públicos cuando estaban garantizando el cumplimiento del estado de alarma".

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