En lo que va de curso académico, se han detectado 33 posibles casos de acoso escolar en Aragón, casi la mitad que el año pasado (cuando se notificaron 60). Estas posibles situaciones de 'bullying' se derivan de las 396 llamadas que recibió el teléfono contra el acoso escolar durante este curso 2018-2019, según los datos ofrecidos por el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón. Este 2 de mayo es el Día Mundial contra el Acoso Escolar. 

Desde la puesta en marcha del teléfono en Aragón  (Comunidad pionera en este servicio)  en el año 2016 se han recibido 1.300 llamadas, de las cuales 208 han sido notificadas como posibles casos de 'bullying'. Por el momento, el curso escolar en el que más situaciones de acoso se registraron fue el 2016-2017 con 115 notificaciones.  

"Ir al colegio era una pesadilla constante porque las humillaciones eran diarias"

La reducción a la mitad de la cifra actual respecto a años anteriores se refleja en el Estudio de Convivencia que ha llevado a cabo Educación junto a la Universidad de Zaragoza, donde la principal conclusión es que la convivencia en los centros escolares de Aragón es buena y ha reflejado una mejoría significativa respecto al realizado en el año 2011. Además en el informe queda patente que ha disminuido la prevalencia de acoso en los institutos, de un 3,7% en el 2011 hasta el 2% actual. Por tanto, la cifra de acoso sigue siendo más común en los colegios.

¿Cómo se actua en caso de 'bullying?

En octubre del año pasado, el Gobierno de Aragón publicó un protocolo de actuación contra el acoso escolar con unas pautas comunes a todos los centros educativos. Este protocolo se activa en el mismo instante en el que hay una solicitud por parte de cualquier miembro de la comunidad educativa. Desde que el centro tiene constancia de que un alumno puede estar siendo una posible víctima de 'bullying' tiene un plazo máximo de dos días para actuar y poner en marcha medidas de prevención.

Algo más de dos semanas después de que se reciba la notificación, la comisión de valoración tendrá que evaluar si realmente se trata de un caso de acoso o no y entonces docentes, familias y otros profesionales deberán llegar a un acuerdo respecto a cómo abordar dicha situación, que deberá ser controlada y supervisada para asegurarse de que el conflicto ha cesado o persiste.

El Gobierno de Aragón insiste en la prevención como un factor indispensable para evitar estas situaciones de acoso y, por ello, ha estrenado este curso escolar un Observatorio de la Convivencia para que alumnos y profesores aborden conjuntamente esta lacra e investiguen sobre cómo resolver de manera constructiva estos conflictos.

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