Ruta desde Boltaña a Morillo

La localidad de Boltaña, cabecera de la comarca del Sobrarbe junto con Aínsa, es un punto de referencia como destino vacacional en la montaña. Cuenta con un entorno natural privilegiado que puede conocerse en numerosas excursiones de distinta dificultad que salen desde la misma localidad.

Proponemos una ruta de dificultad baja, aunque por la distancia a recorrer es más recomendable para personas aficionadas a andar por el monte y que estén acostumbradas a hacerlo. Se trata de una travesía, de unos 11 km, hasta Morillo de Sampietro, que puede recorrerse en 3 h 30 min, aunque el tiempo dedicado será algo mayor si aprovechamos un pequeño desvío a Ascaso para conocer este antiguo núcleo poblacional, una pequeña joya escondida en la montaña, donde todavía algunas de sus casas tradicionales mantienen una decoración policromada en las fachadas. Resultan también muy curiosos sus relojes de sol, como el que se ve en la antigua casa del herrero y, a la salida del pueblo, las pozas, de reconocida fama, perfectas en verano para darse un chapuzón.

Arrancamos nuestra ruta desde Boltaña. En su inicio, comparte recorrido con el sendero PR-HU 40 que se dirige a San Vicente de Labuerda. Se rodea el castillo de Boltaña y permite visitar la ermita de Santa Bárbara. Localizada en un bucólico paraje, se trata de una obra del siglo XVII levantada en mampostería, que presenta una puerta adintelada a los pies, con una hornacina en su parte superior, todo ello protegido por un pórtico de medio cañón.

Tras disfrutar de la hermosa arquitectura de este templo y la belleza de su entorno, seguiremos nuestro camino para, tras alcanzar un cruce de pistas, abandonar el PR-HU 40 y tomar el camino de la izquierda en dirección a Morillo de Sampietro, hasta encontrar la pista que nos llevará a destino.

Magníficas vistas

Una vez en Morillo podremos disfrutar de magnificas vistas al valle Vió, Monte Perdido, Castillo Mayor y Peña Montañesa. Mirando hacia el valle del Cinca observaremos también las localidades de Laspuña, Ceresa, Puyarruego y Belsierre. El núcleo poblacional de Morillo es uno de esos lugares en los que parece haberse detenido el tiempo. Su pequeño y típico caserío ocupa un escarpe rocoso sobre la orilla derecha del río Yesa. Caminando por sus rincones podremos ver sus casas de arquitectura pirenaica asentadas sobre los accidentes del terreno en el que destaca la iglesia románica de San Lorenzo, con pinturas murales bajomedievales en su interior.

Para quien no pueda hacer el recorrido a pie, existe la opción de subir en coche hasta Ascaso. De la vieja herrería sale el sendero PR HU-185 hasta Morillo de Sampietro, un itinerario más corto y totalmente señalizado.