La sentencia del caso Gürtel, con la condena al Partido Popular por haberse lucrado de la trama, también ha convulsionado la política aragonesa. El presidente de la Comunidad, Javier Lambán, consideró ayer que es "inevitable" que se celebren unas elecciones generales en los próximos meses porque "no hay aritmética en el Parlamento para constituir un gobierno que pueda encauzar la complicadísima situación que vive el país".

Por su parte, el líder del PP-Aragón, Luis María Beamonte, defendió que "los graves errores que algunos cometieron en el pasado nunca, nunca, pueden volver a repetirse" e hizo hincapié en que el PP de Aragón ha gobernado las principales instituciones y "lo ha hecho de manera modélica". "Somos un partido limpio. Esa es la obligación", sostuvo.

Lambán indicó que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, debería haber dimitido y convocado elecciones en cuando se conoció la sentencia. Al no hacerlo, entraron en acción los socialistas con la "decisión valiente" de su secretario general, Pedro Sánchez, de presentar una moción de censura para desatascar la "situación diabólica" que se vive en un país que está paralizado y que "se está resintiendo en los mercados".

En su opinión, los ciudadanos premiarán a las fuerzas políticas que "pongan por delante de estrategias cortoplacistas bienes políticos como la unidad de España, la cohesión y la defensa de la Constitución". Mañana asistirá, junto a otros barones socialistas entre los que se encontrará la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, a la reunión extraordinaria del Comité Federal del PSOE, convocada para ratificar la decisión de presentar una moción de censura, aunque Sánchez no le informó antes de registrarla.

También Beamonte valoró ayer el fallo judicial e instó a su propio partido a "estar a la altura de las circunstancias" por los alcaldes, concejales, afiliados y simpatizantes que han contribuido a construirlo. "Eso es lo importante; seguir trabajando en aras del interés general con un proyecto sólido", defendió el presidente del PP-Aragón.

Moción en el Ayuntamiento

En cuanto se hizo pública la sentencia del caso Gürtel, Chunta Aragonesista (CHA) reclamó la dimisión "inmediata" del presidente del Gobierno Central, Mariano Rajoy, como medida de "higiene democrática". La formación quiere llevar esta reprobación al pleno del Ayuntamiento de Zaragoza que se celebrará el 1 de junio a través de una moción en la que, además de exigir esa renuncia, reclamará a los partidos que soliciten expresamente el apoyo de los grupos parlamentarios a la moción de censura presentada por el PSOE y a la posterior convocatoria de elecciones generales.

La moción se fundamenta en que el fallo judicial, con la condena de varios exdirigentes del PP con las más altas responsabilidades políticas, "hace necesario adoptar medidas urgentes y establecer posicionamientos políticos que dejen ver, sin ningún tipo de duda, quiénes estamos por la regeneración de la vida política y quiénes siguen viendo, en las estructuras del poder político, una forma de control social y económico".

También se analizó la coyuntura política que atraviesa el país en la reunión que mantuvieron en Zaragoza simpatizantes de IU Aragón. Álvaro Sanz, su coordinador general, mostró su satisfacción por una sentencia que demuestra "que había una trama sistémica de corrupción más propia de una mafia que de una organización política llamada a gobernar el común de todos y todas". Para lograr la regeneración democrática del país, Sanz instó a "aislar al PP en todas y cada una de las instituciones en las que está representado". Hizo referencia expresa al Ayuntamiento de Zaragoza para criticar que "todo el arco de la oposición está alineado con un partido que consideramos que ahora mismo debería estar aisladísimo".

Sanz recordó que Unidos Podemos ya ha confirmado su apoyo a la moción de censura del socialista Pedro Sánchez. "Lo que nosotros queremos es echar a Mariano Rajoy y al PP ya", recalcó, y cargó también contra Ciudadanos, formación a la que acusó de "no querer aprovechar esta oportunidad".