Nacen menos niños en Aragón pero vuelve a aumentar la población extranjera
En 2018 había unos 1.300 niños (de 0 a 4 años) menos que un año atrás. El volumen de mayores de 85 años marca máximos históricos.
La natalidad, o más concretamente la disminución de nacimientos, se ha convertido en uno de los mayores problemas de la demografía aragonesa. Según los últimos datos del padrón municipal, referidos al 1 de enero de 2018, el número de personas residentes en Aragón ha vuelto a descender, después de que en 2017 se consiguiera estabilizarlo. El retraso de la edad en la que se tiene el primer hijo, la preferencia por tener solo un descendiente o en casos excepcionales dos, y el regreso a sus países de origen de miles de inmigrantes (todo ello a consecuencia de la crisis económica) provocaron que en 2012 comenzara a descender el número de habitantes. Una tendencia que se consiguió parar en 2017, pero que otra vez se ha impuesto .
En la actualidad, Aragón cuenta con 1.307.984 habitantes, cerca de mil menos que en 2017. Este descenso se percibe especialmente entre los menores de 0 a 9 años. Mientras que el año pasado había 57.700 niños de hasta 4 años, en la actualidad residen en la Comunidad unos 1.300 menos. Lo mismo ocurre en el caso de aquellos que han cumplido entre 5 y 9 años, que han pasado de ser casi 65.0000 a llegar apenas a los 64.000. Por el contrario, los que tienen edades comprendidas entre los 10 y 19 años marcan máximos en los últimos 20 años. Todo ello propiciado por el 'boom' de la natalidad antes de la llegada de la crisis y el incremento de población inmigrante y sus descendientes (tanto los que ya habían nacido como los que lo hicieron cuando ya residían en Aragón).
La comunidad aragonesa también se caracteriza por incrementar su índice de envejecimiento. Si hace una década la edad media de los aragoneses apenas rozaba los 43 años, en la actualidad se encuentra cerca de los 45; una cifra que se supera ampliamente si se tiene en cuenta a la población de la provincia de Teruel (46,4 años). No obstante, en España existen provincias con edades más elevadas como puede ser el caso de Orense o Zamora, donde se superan los 50 años de media.
Esto provoca que en Aragón los grupos de edad de más de 85 años marquen máximos históricos en cada nuevo padrón que se publica. En la actualidad, unas 55.000 personas tienen más de 85 años, mientras que hace una década apenas se llegaba a los 37.000. De este modo, ahora hay cerca de 600 residentes con más de 100 años, 4.000 cuyo DNI lleva activo entre 95 y 99 años; más de 15.500 con una edad comprendida entre los 90 y 95 y casi 35.000 con entre 85 y 89 años. Estas elevadas cifras son producto de unas mejores condiciones de vida (tanto labores como sanitarias) y unos hábitos más saludables.
A pesar de todo ello, la Comunidad se caracteriza por que el grupo de edad más frecuente sea el formado por aragoneses de entre 40 y 44 años, con 107.661 residentes. Esta situación se repite por tercer año consecutivo, fruto del 'boom' de nacimientos de los años 70 y 80. Prueba de ello es que el grupo quinquenal (de cinco años) que más volumen de población aglutina va variando cada lustro. A principios del siglo XXI se encontraba en los 25 y 29 años, luego pasó al periodo de 30 y 34 años y así hasta la actualidad.
La inmigración vuelve a crecer
Mientras se reduce la natalidad y aumenta de manera considerable la esperanza de vida, la población inmigrante juega un papel esencial en el desarrollo de la demografía aragonesa. Sin ellos, el volumen de personas en edad de trabajar y de nuevos menores descendería de forma considerable. Prueba de ello es que los años en los que se perdió y ganó más población se corresponden con los momentos en los que más gente venía del extranjero y, por el contrario, más inmigrantes regresaban a sus países de origen. Tras los retornos protagonizados entre 2013 y 2016, el año pasado se registró el primer aumento de población inmigrante; una tendencia que se mantiene en 2018.
En estos momentos hay más de 136.000 extranjeros empadronados en Aragón; siendo la población rumana la más voluminosa, con cerca de 47.000 miembros. No obstante, es necesario destacar que cada día hay menos rumanos residentes en la Comunidad, puesto que hace cinco año se superaban ampliamente los 67.000 residentes. En Aragón también destacan los originarios de Marruecos (18.313), Nicaragua (5.644) y China (5.569).
Estas tendencias han ido evolucionando a lo largo de los años. Hace dos décadas apenas había 8.000 residentes extranjeros en Aragón, mientras que en 2008 ya se superaban los 154.000; una cifra ligeramente más elevada que la actual. En este tiempo también han cambiado sus nacionalidades: en 2008 había un amplio volumen de búlgaros (5.350), rumanos (57.043), marroquíes (15.108) y ecuatorianos (11.521).
En estos diez últimos años, Aragón ha perdido buena parte de su atractivo para aquellos que nacieron en Ecuador, mientras que lo ha ganado entre los nicaragüenses. Esta misma tendencia se ha vivido con búlgaros y rumanos; además, cabe destacar el auge de la población china, que un año más ha marcado máximos históricos al superar los 5.500 habitantes en Aragón.
