Hasta un 20% de la población aragonesa sufre de insomnio crónico

Los expertos avisan de los efectos en la salud de las personas que duermen menos horas de las aconsejadas.

Las mujeres duermen más que los hombres, según los datos de una app para monitorizar el sueño.
Un 20% de la población aragonesa sufre insomnio crónico.
Fotolia

Dar una vuelta y otra en la cama, mirar cómo pasan las horas en el reloj sin pegar ojo y, sobre todo, levantarse totalmente destrozado al día siguiente. Los trastornos del sueño se han disparado en los últimos años y ya es aproximadamente un 20% de la población aragonesa la que sufre insomnio crónico, una de las afecciones de este tipo más frecuentes. El viernes de esta pasada semana se celebró el Día Mundial del Sueño.

Un adulto debería dormir de media entre 7,5 y 9 horas. Un tiempo de sueño difícil de conseguir por muchos ciudadanos, que sufren las consecuencias en el día a día de esta falta de descanso. De hecho, algunos estudios apuntan a que un 10% de las mujeres de la Comunidad aragonesa, el doble que la media nacional, reconocen que incluso duermen cuatro horas o menos cada noche. Esta reducción de descanso nocturno tiene consecuencias en la salud. Está comprobado que no dormir adecuadamente puede aumentar el riesgo de padecer hipertensión, sufrir un ictus, un infarto, un cáncer e influir en cómo se envejece.

Hay muchos trastornos del sueño. Algunos están relacionados con problemas respiratorios o apneas; otros como las parasomnias implican conductas anómalas durante el sueño o también hay quien sufre narcolepsia, de origen neurológico, que produce una excesiva somnolencia durante el día. Sin embargo, es el insomnio el que ocupa el primer puesto del ranquin con diferencia. "Todos hemos sufrido algún episodio en algún momento de la vida", asegura el psiquiatra Julio González, que está haciendo la residencia en Neurofisiología. De hecho, un 20% de la población sufre insomnio crónico.

Pero, ¿qué motiva que una persona sufra o no problemas para conciliar el sueño? Los expertos reconocen que hay factores externos que condicionan el descanso, como el estrés, pero también lo hacen otros ambientales como el intentar dormir con ruido, luz o una temperatura inadecuada (sea por frío o por calor).

El insomnio crónico está relacionado, además, con otras causas. Principalmente, según opinan los expertos, por hábitos inadecuados para conciliar el sueño o por otros condicionantes: enfermedades mentales o dolor crónico. Pero también, reconoce González, hay formas de insomnio "primario" relacionadas con la genética.

Sin embargo, los expertos hacen hincapié en que tomándose en serio este problema y, sobre todo, buscando ayuda profesional se pueden encontrar soluciones. Antes de cualquier recomendación farmacológica, los expertos aconsejan un cambio de hábitos, con el que normalmente se consiguen "resultados muy positivos". Abogan por fomentar unas rutinas diarias que "preparen el sueño", como mantener unas condiciones ambientales óptimas (ruido o temperatura) o, por ejemplo, desarrollar pautas de alimentación. "Se recomienda una comida ligera y cenar al menos dos horas antes de irse a la cama", explica González, que apuesta también por mantener constante la hora para despertarse. "Es la manera de regular el reloj biológico", añade. "Además, aunque el deporte es aconsejable cien por cien no se debe practicar dos horas antes de irse a la cama", subraya González.

Opción farmacológica

La ayuda farmacológica para conciliar el sueño está sobre la mesa. Aunque no es una opción que rechazan por completo los médicos, sí que hacen hincapié en que tiene que formar parte de una "estrategia terapéutica". "Una vez que fallan las otras medidas, por ejemplo, de cambios de hábitos, se puede abogar por la opción de los medicamentos, pero siempre con el respaldo de un facultativo", recalca González, que recuerda que hay que valorar qué fármaco se da a cada paciente.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión