Aragón

La crisis interna provoca que Soro revalide al frente de CHA con solo el 65% de apoyos

Impone a Carmen Martínez como secretaria general pese al sector crítico. Asegura que cree en el "pluralismo" y en un proyecto político "colectivo".

El presidente de Chunta, José Luis Soro, y la nueva secretaria general, Carmen Martínez, en la votación de las enmiendas a los estatutos, ayer por la tarde, en la Ciudad Escolar Pignatelli.
José Miguel Marco

El presidente de CHA, José Luis Soro, seguirá al frente del partido, pero con menos apoyos que hace cuatro años. La crisis interna desatada en los días previos al congreso (la Asambleya Nazional) se enquistó ayer ante la falta de acuerdo con el sector crítico, que exigió en un manifiesto la "refundación" del partido. Esto provocó que Soro fuera reelegido con solo el 64,7% de los votos, 9,5 puntos menos de los que obtuvo hace cuatro años: Un total de 193 delegados avaló su liderazgo frente a los 105 que votaron en blanco. Hubo otros cinco votos nulos.


Tras su designación, José Luis Soro aseguró anoche que se sentía "muy satisfecho" de que tras cuatro años "muy difíciles" hubiera logrado el apoyo mayoritario del partido. En este sentido, reconoció que el congreso estaba siendo "muy intenso" y suponía un punto de inflexión. "Ha habido mucho debate y afortunadamente mucha discrepancia. Creo en el pluralismo y me dan escalofríos los partidos que practican en culto al líder", dijo antes de resaltar que Chunta es un proyecto colectivo, "de trabajo en equipo" y que depende del conjunto de la militancia, "no de una o dos personas".


El líder nacionalista de CHA y su equipo se llevaron un revolcón nada más empezar el cónclave en la Ciudad Escolar Pignatelli, ya que no lograron sacar adelante su informe de gestión, algo inédito en la escena política aragonesa. Hasta 130 votos cosecharon en contra, frente a 99 apoyos y 20 abstenciones. En este punto intervino Bizén Fuster, uno de los tres expresidentes del partido que ha firmado el manifiesto crítico con la dirección y que está avalado por un total de 150 militantes. Todos ellos renunciaron a presentar una candidatura alternativa, conscientes de que no sumaban más fuerzas.


Soro y la nueva secretaria general, la diputada autonómica Carmen Martínez, intentaron acercar posturas, para lo que se reunieron por la tarde con una delegación del sector crítico para negociar los dos puntos exigidos para sellar la paz: la incompatibilidad de ejercer cargos orgánicos e institucionales y la democratización en la elección de la secretaria general.


No hubo forma de cerrar un acuerdo, por lo que los críticos mantuvieron las enmiendas a los estatutos que planteaban que fuera la asamblea la que eligiera al presidente, al secretario general y al consejo nacional, además de la incompatibilidad de cargos. Como era esperable, no lograron imponerse en la asamblea, aunque la votación fue muy ajustada. Las diferencias se redujeron a 19 y 38 votos, respectivamente.


José Luis Soro explicó que la separación de cargos es un debate "recurrente" en las tres décadas de vida del partido, aunque la mayoría lo vio ayer como una "oportunidad". Así, manifestó que estar al frente de la Consejería de Vertebración supone una ocasión de "teñir" de la personalidad de CHA al Gobierno, "de llevar el proyecto aragonesista y de izquierdas a todo Aragón".


El líder nacionalista consideró que el congreso ha servido para recuperar la ilusión y el optimismo por ser "chunteros" y tomar decisiones importantes. En este apartado citó la vocación de paridad en el partido y el peso que se le vuelve a dar a las juventudes, que tendrán ahora voz y voto en los máximos órganos de la formación, el Consello y el Comité Nazional.