Descubren en el Moncayo una especie de seta nueva
Su ADN se estudió en Holanda pero aún no tiene nombre y está sin registrar.
Durante la celebración de las pasadas X Jornadas Micológicas organizadas por la Asociación Micológica Moncayo que se desarrollaron en otoño de 2013, el grupo formado por Luis Ballester (colaborador habitual de esta agrupación y director técnico de las jornadas desde la primera edición de las mismas), Juantxo Garrido (presidente de la Asociación Micológica Sarllé), y Javier García (Asociación Micológica Sarllé), ambos también habituales colaboradores, tuvieron la suerte así como la habilidad de encontrar tres especies de setas durante su salida micológica.
Fue el 2 de noviembre de 2013 y, dada la complejidad de las variedades, "todas ellas fueron enviadas a laboratorio en Holanda para realizar las oportunas pruebas de ADN al objeto de determinarlas con total y absoluta precisión y fiabilidad", tal y como confirmó a HERALDO Javier Cortés, coordinador de la asociación.
Entre las especies localizadas cabe destacar la denominada Hebeloma sp., "una especie nueva para la ciencia, vista por primera vez en el Moncayo y de la que no se tienen noticias de apariciones en ningún otro lugar. Todavía no tiene nombre y, por ello, está todavía sin publicar", explicó Cortés.
Además, también se localizó la especie denominada Hebeloma subtortum, que "es una especie nueva para la ciencia, vista por primera vez en Moncayo, aunque posteriormente se encontraron más ejemplares en los montes de Paniza". En este caso, "Henri Beker (Holanda), que la analizó en el laboratorio, bautizó la especie con este nombre, en vez de, como es habitual, ponerle el suyo como descubridor, lo cual dice mucho a favor de esta persona", continuó Cortés.
La última especie localizada fue Hebeloma hiemale, "que es primera cita de esta especie en Moncayo".
Todas estas especies, aclaró el coordinador de la Asociación Micológica del Moncayo, "no son comestibles. Es más, la práctica totalidad de especies del género Hebeloma son tóxicas, e incluso potencialmente tóxicas".
Sin embargo, continuó el experto, "el interés de las mismas estriba en su importancia medioambiental y científica, dejando bien a las claras la riqueza y el potencial que el monte Moncayo tiene en ambos sentidos en el plano micológico, en el cual seguimos trabajando de forma constante".
Hay que añadir que al equipo formado por Luis Ballester se sumaron más tarde miembros de la Asociación Micológica San Martín de Moncayo y que fue en un hábitat de Betula alba (abedul), y Salix atrocinerea (sauce cenizo o ceniciento) donde fueron descubiertas las tres especies micológicas anterioremente citadas y detalladas.Hasta 650 especies
Cortés informó de que el Moncayo cuenta con unas 650 especies diferentes. "Una gran biodiversidad para un lugar relativamente pequeño si lo comparamos, por ejemplo, con los Pirineos". No en vano, cuenta con pino, roble, abedul, hayedo... donde dar cabida a diferentes especies tanto de hongos como de setas abriendo, sin duda, un gran abanico de posibilidades a los amantes de la micología, que cada vez son más, y generando, a su vez, un recurso activo tanto para el monte como para los pueblos de los alrededores.