Los niños saharauis presiden las Cortes

Una veintena de chicos del Sáhara visitaron ayer el palacio de la Aljafería, donde fueron recibidos por Antonio Cosculluela.

El presidente de las Cortes, AntonioCosculluela –a la izquierda–, recibió ayer a las familias.
El presidente de las Cortes, AntonioCosculluela –a la izquierda–, recibió ayer a las familias.
j. miguel marco

Entre las paredes del hemiciclo de las Cortes de Aragón resonaron ayer sonidos que no eran los habituales; los discursos y riñas políticas se cambiaron durante un rato por la risa y algarabía de una veintena de jóvenes saharauis de entre 7 y 12 años que visitaron la Aljafería como parte del programa ‘Vacaciones en Paz’. Dicha iniciativa, que organizan conjuntamente varias asociaciones de toda España desde hace más de 30 años, busca ofrecer a los chavales de Tinduf (Argelia), la oportunidad de pasar los veranos alejados de los campamentos de refugiados en los que viven, donde las condiciones son especialmente duras en el período estival.


Por ello, se alojan durante dos meses con familias que se ofrecen voluntariamente a acogerlos. Mientras dura su estancia reciben atención médica, mejoran su alimentación, aprenden el idioma y aprovechan para conocer su lugar de acogida. Este año fueron 145 los chicos que pudieron acogerse al programa en Aragón y que desembarcaron el pasado 23 de junio en el aeropuerto de Zaragoza, si bien luego se repartieron entre las tres provincias.


Desde entonces los pequeños han visitado el Ayuntamiento, el Parque de Atracciones o las Cortes, donde ayer por la mañana les recibió el presidente de la Cámara, Antonio Cosculluela. Los niños accedieron al hemiciclo y se sentaron en los asientos que normalmente ocupan los diputados aragoneses.


Allí, Cosculluela les dio la bienvenida y expresó su "solidaridad" con la causa saharaui. Además, el político se mostró "satisfecho por poder compartir este momento" con los jóvenes. Después los pequeños, acompañados de sus familias de acogida, se dividieron en dos grupos y recorrieron los rincones del palacio de la Aljafería, donde las guías turísticas les mostraron cada detalle del edificio.

Vacaciones que se acaban

Jesús Maestro, secretario de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui en Aragón Um Draiga, valoró la participación en el programa ahora que llega a su fin. "Cada año cuesta más encontrar gente. Hemos pasado de poder traer 10.000 niños en 2008 a los cerca de 5.000 de este año", comentó el secretario. Como principales factores de este descenso,Jesús Maestro apunta a la crisis y al paro. Aún así, lo que más le gustaría no sería que aumentara el número de acogidas, sino que los jóvenes "pudieran estar en su tierra".


Por el momento, los pequeños saharauis tendrán sus mejores vacaciones en familias como la de Adolfo y Ester, que este año participaban por primera vez. "Queríamos colaborar con los demás de forma tangible", apunta Adolfo. A su lado corretea alegre ChejAhmed, de 10 años. El pequeño afirma que le gusta "todo" de Aragón, pero especialmente las piscinas; algo a lo que dirá adiós por un año el próximo 22 de agosto, cuando coja el avión de vuelta al árido Tinduf.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión