Lobón pedirá dinero a Madrid para controlar las escorrentías en Bailín

Reclamará incluir estas obras en el convenio para la limpieza del río

El consejero de Medio Ambiente, Modesto Lobón, pedirá incluir en el convenio para el plan integral de descontaminación del río Gállego, para el que ya hay compromiso del Ministerio, las obras necesarias para minimizar los efectos contaminantes de las escorrentías de agua con lindano en el vertedero de Bailín (Sabiñánigo), donde se está realizando el traslado de residuos.


Según la Confederación Hidrográfica del Ebro, estos aportes sin depurar al barranco de Bailín están en el origen de las elevadas concentraciones del pesticida en el Gállego, por lo que en una reunión mantenida el lunes con el consejero y técnicos de ambas partes, el presidente de la CHE, Xavier de Pedro, pidió a la DGA ejecutar las actuaciones necesarias para corregir la situación y reducir las afecciones "lo máximo posible".


De Pedro insistió ayer en que el lindano que llega al río procede de las escorrentías en la zona donde se ha llevado a cabo el traslado de residuos del pesticida del viejo vertedero de Bailín a la nueva celda de seguridad. Coincidió con Lobón en lo "complicado" que resulta controlar por completo esos vertidos incontrolados, pero se mostró convencido de que "una parte sí que se podrá".


Por su parte, Modesto Lobón anunció su intención de reclamar que esas obras, al igual que las que están pendientes todavía en los vertederos de Bailín y Sardas y en las instalaciones de Inquinosa, vayan con cargo al plan de limpieza integral del Gállego. "Esa es la filosofía del convenio", afirmó. Y avanzó que trasladará esta petición a la ministra, Isabel García Tejerina, y al secretario de Estado, Federico Ramos, en la comisión consultiva convocada el próximo lunes. "Aprovecharé para urgir el convenio, que de momento no tiene fecha", recordó el consejero. Allí también solicitará concretar nuevas partidas económicas para las actuaciones más inmediatas como las de las filtraciones en Bailín, además de los 6,6 millones para Villanueva.


Mientras, los técnicos del Gobierno de Aragón ya celebraron ayer una primera reunión para estudiar las posibles medidas correctoras de las escorrentías, que en un principio pasarían por encauzar esas aguas contaminadas hacia la depuradora y por ampliar los tanques de tormentas. En esos depósitos se acumulan las aguas residuales antes de ser tratadas. Además, según informó el presidente de la CHE, también se limpiará la estación de aforos de Sabiñánigo. 


"Con todos los informes técnicos –reiteró Lobón–, hemos hecho las obras bien, otra cosa es que haya surgido un problema y haya que resolverlo".