Amigos del Pueblo Saharaui busca familias para acoger a los niños este verano

La asociación soriana Amigos del Pueblo Saharaui se ha puesto en marcha para buscar familias que estén dispuestas a acoger a los niños que llegan a Soria procedentes del Sahara cada año en verano con el programa ‘Vacaciones en Paz’.

Este programa consiste en la acogida, durante los meses de julio y agosto, de menores saharauis "con el fin de que tengan una atención sanitaria, una alimentación equilibrada, mejorar su nivel de español, dado que es su segunda lengua, además de librarse de las tremendas condiciones climatológicas veraniegas en el desierto argelino y disfrutar del verano soriano", señalaron desde la asociación.

"Estamos en campaña para buscar familias de acogida porque vamos a la baja y queremos ampliar un poco para poder traer a más niños", indicó el presidente de la asociación José Miguel Pardo. Los niños que repiten en el programa de 2016 llegarán a las mismas familias que los tuvieron en ediciones anteriores, por lo tanto ya la tiene asegurada la estancia. Son unos 13 núcleos familiares que ya están comprometidos pero la intención de la asociación es llegar a recibir unos 17 o más niños, "mientras más mejor", según apuntó a HERALDO Pardo.

"Los niños se van renovando porque solo permanecen en el programa durante tres o cuatro años, entonces necesitamos familias para los nuevos y para traer más de los 13 que acostumbramos. Ahora que suena tanto el asunto de los campamentos de los refugiados queremos recordar que las familias de estos niños llevan 40 años viviendo en campamentos, en jaimas y en condiciones muy duras, por eso nos gustaría a ayudar a más niños a pasar unas vacaciones en Soria para que recarguen pilas y luego puedan afrontar los otros 10 meses de vida en el campamento", precisó el presidente.

Explican desde la asociación que las familias sorianas que acojan a los chavales no tienen que realizar ningún pago, únicamente ocuparse de su manutención durante dos meses, incluida la visita al pediatra de cabecera de Sacyl, para lo cual existe un convenio entre la Junta y el Ministerio de Salud saharaui que cubre esos gastos. Tampoco tienen que ser familias con niños, pueden ser parejas, personas solas, jóvenes o mayores.

"El principal requisito es poder disponer de tiempo para tenerles y poder estar con ellos. El tema económico o de superficie no es un problema para los niños porque están acostumbrados a vivir en un campamento pero poder dedicarles tiempo sí porque establecen mucho arraigo familiar y están acostumbrados a estar rodeados de su familia todo el tiempo. Ellos disfrutan mucho cuando vienen, pero también están deseando que llegue la hora de volver a sus hogares porque echan de menos a su familia", comentó Pardo.

Además de la crisis, una de las cosas que echa para atrás a las familias para el acogimiento es precisamente ese tiempo de dos meses que deben dedicar a los niños. "Es difícil que una persona tenga dos meses de vacaciones, una pareja se puede turnar pero es complicado. Creo que ese el principal problema que tenemos para conseguir familias de acogida porque luego no tienen que hacer grandes gastos económicos ni contar con viviendas espaciosas", recalcó Pardo.