Medidas del Gobierno de Rajoy

Santamaría: "Si hubiera dejado el país como ellos, me daría vergüenza salir de casa"

En clara alusión al PSOE, la vicepresidenta del Gobierno ha censurado que los socialistas animen a los ciudadanos a echarse a la calle.

Soraya Sáenz de Santamaría
Sáenz de Santamaría: "Si hubiera dejado el país como ellos, me daría vergüenza salir de casa"
EFE

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha criticado este sábado el llamamiento a los ciudadanos de algunos dirigentes socialistas para protestar contra los recortes y ha dicho que si ella hubiera dejado el país como lo ha dejado el PSOE, le daría "vergüenza salir de casa".


Así lo ha manifestado la vicepresidenta durante su intervención en la jornada inaugural del XV Congreso del PP de Madrid, que esta tarde reelegirá a Esperanza Aguirre presidenta del partido regional.


"Algunos invitan y dicen que hay que salir a la calle. Si yo hubiera dejado el país como lo han dejado ellos, me daría vergüenza salir de casa", ha subrayado la vicepresidenta.


Precisamente, este sábado la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, hizo un llamamiento a los jóvenes de su partido, que este fin de semana celebran su congreso, para que salgan a la red y a la calle a expresar su oposición a las políticas "intolerables" del Gobierno de Mariano Rajoy.


Sáenz de Santamaría no ha querido hablar de la herencia recibida porque, en su opinión, no es necesario, ya que "las consecuencias de esa deuda son las que nos han colocado en esta situación".


En ningún momento ha mencionado la subida de impuestos, entre ellos el IVA, pero ha dejado claro que la situación es "peor de lo que se esperaba" y que para salir de la crisis es necesario, "por desgracia, hacer esfuerzos y sacrificios".


Pese a ello, ha querido trasmitir un mensaje de optimismo y esperanza a las familias que lo están pasando mal. "Viviremos meses difíciles, complicados. Va a costar mucho, pero la sociedad quiere salir adelante", ha apostillado.


Igual que en las economías domésticas, es imprescindible, ha dicho, cortar el déficit, porque cuando España deje de pagar deuda se podrá destinar ese dinero a la educación, la sanidad y los servicios públicos.


Pero junto al control del déficit es necesario llevar a cabo reformas y emprender políticas para "crecer, sentar las bases de futuro y crear empleo", ha añadido.


Se trata, además, de reformar todo lo que no funciona y de aprovechar la crisis para cambiar y modernizar todas las administraciones porque, a su juicio, los ciudadanos tienen derecho a conocer los contratos o los sueldos, por ejemplo.


Ha insistido en la necesidad de que España sea competitiva, lo que implica "cambiar el mercado laboral y luchar contra el fraude en todos los ámbitos".


Así, ha dejado claro que el país no puede prescindir de los trabajadores de 50 años, porque "están en su mejor momento", ha resaltado la vicepresidenta, antes de manifestar la conveniencia de acabar la reforma del sistema financiero para que haya crédito, especialmente para las pymes, porque "sin crédito no hay gasolina para la economía".


Tras insistir en la necesidad de reformar la educación y la sanidad, porque "aquí no sirven ni populismos ni electoralismos", Sáenz de Santamaría se ha referido al estado de las autonomías, que tiene que salir de esta crisis "más responsable y reforzado" a la hora de rendir cuentas.


Y para afrontar la crisis, el Gobierno, según su vicepresidenta, tiene varias cosas a su favor, entre ellas la estabilidad que le da la mayoría absoluta, pero sin renunciar a buscar consensos.


Además, el Ejecutivo tiene "tiempo, el que le han dado los españoles para poner en marcha reformas que "no se han hecho nunca en España", y, sobre todo, "decisión y voluntad", porque siente "el aliento de un pueblo" que le ha votado y de unos afiliados que le han dado "el programa, las ideas y el impulso para sacarlo adelante".


Ya en clave regional, la vicepresidenta no ha ahorrado elogios al Gobierno de Esperanza Aguirre, un ejemplo de "firmeza, de cercanía, de vanguardia" y de políticas que han colocado a la Comunidad de Madrid "a la vanguardia de España y de Europa".