gastronomía
Cuatro nuevos soles Repsol en Aragón: "Es una alegría que se premie así a los pueblecicos"
Con la nueva incorporación, en Aragón se suman un total de 19 restaurantes con la distinción.
Pocas noches tienen tantos soles radiantes como la de este lunes. Y Aragón ha amanecido hoy martes con cuatro nuevos soles Repsol.
Cuatro brillantes galardones que iluminan todavía más el panorama gastronómico de las tres provincias, de capitales a pequeños pueblos: Goralai, La Fábrica de Solfa, Casa Arcas y Trasiego. De esta forma, la célebre guía premió aquellos restaurantes donde sentirse como en casa, en los que se realza la calidad de los productos, que siguen creciendo y experimentan nuevos caminos junto con unos vinos que completan la experiencia culinaria. "La gente que está volviendo a sus pueblos, está reinterpretando la gastronomía rural", se escuchó sobre el escenario de la gala, que se celebró en el Auditorio de la Diputación de Alicante.
Menos de 160 habitantes están censados en Villanova –según datos del INE– y en sus calles se puede encontrar Casa Arcas, una de las protagonistas aragonesas de la noche. Este pequeño hotel se enclava en el valle de Benasque, en las cercanías de la estación de esquí de Cerler. Envidiables vistas a la montaña, el calor de una antigua chimenea de piedra y un menú degustación que cambia cada día son algunos de los aspectos que resaltó la guía. Tras esos platos con vocación clásica y sabor local están las manos de David Beltrán, un chef curtido junto a Martín Berasategui. Ainhoa Lozano, también alma del establecimiento, recogió el galardón en la gala, presentada por la humorista Silvia Abril.
"Es una alegría que se premie así a los pueblecicos, que no se vaya todo a las ciudades", señaló Kike Micolau, cocinero de La Fábrica de Solfa, a orillas del río Matarraña, que también regresa a Beceite con un sol. "Una distinción así hace mucha ilusión, es la alegría tras el sacrificio y el trabajo", confesó Micolau, que recibió un galardón en la pasada edición de los Premios Con Mucho Gusto de HERALDO. Los productos de la zona, como el 'fesol', una judía blanca salvada de la extinción, es una de las banderas de este hotel-restaurante con tanto encanto, donde también se encuentran los sabores a caza, setas o trufa.
En el cielo de la provincia de Huesca luce otro nuevo sol: el de Trasiego, de Barbastro. Compartir hogar con el consejo Regulador de la Denominación de Origen Somontano le permite disponer de la mejor bodega de la zona. En los fogones de Javi Matinero se descubren iconos de la tradición culinaria aragonesa como el tomate rosa, el Ternasco de Aragón o los quesos oscenses, entre otros ingredientes.
Además del alegato al medio rural, hubo un guiño a aquellas cocinas en las que se respira pasión y amor, muestra de ello es Goralai, el cuarto de los premiados aragoneses. "Desde que empezamos estamos los dos juntos y es un apoyo mutuo", confesaron Jorge Lara y Jasone San Martín a este periódico al término de la gala. Esta pareja recogió su esfera y desde hoy también lucen el círculo naranja en sus chaquetillas. "De la primera persona que me he acordado ha sido de mi madre, que falleció hace un año, y de los clientes, que han permitido que esto se haga realidad", desveló Lara. En este restaurante de Zaragoza se marida el buen comer con arte, manteles de lino, cristalería de calidad y una vajilla que se adapta a cada receta, marcada por la cocina de temporada, sin dejar de lado lo clásico. "Que te reconozcan de esta forma 15 años de trabajo es un chupinazo, estamos muy emocionados", añadió Jorge.
El acento aragonés tampoco faltó en el lado de los entregadores. Alberto Ferruz, natural de Cariñena y chef de BonAmb de Jávea –con dos estrellas Michelin y tres soles Repsol–, repartió alegría en una de las distintas tandas de premios. Además, en la gala, la primera que tiene lugar fuera del País Vasco en 44 años, se reivindicó la importancia de la mujer en la gastronomía.
El resto del paisaje 'soleado'
Hasta esta edición, en Aragón se contaban 16 soles en total, repartidos en las tres provincias, siendo Cancook el único que luce dos de estas distinciones –la última estrenada el año pasado– y que las mantienen. En la capital aragonesa son Absinthium, Novodabo, El Chalet, Gente Rara, La Prensa, La Senda, Quema y Gamberro, este último desde 2022. En tierras oscenses se encuentran Lillas Pastia, Tatau y Venta del Sotón, ambos en Huesca, Vidocq de Formigal y Callizo de Aínsa. Por último, Hospedería El Batán, en la localidad turolense de Tramacastilla. Noches como la de ayer demuestran la rasmia gastronómica de Aragón.
Los restaurantes con astros en Aragón
Después de la nueva edición de los soles Repsol, en Aragón se cuentan 19 de estos galardones –que en todo el país suman ya 712 restaurantes–. La mayoría de los establecimientos que lucen una estrella Michelin, también cuentan en su cielo –y chaquetilla– con un sol.
Como en otras comunidades autónomas, en Aragón esa historia se repite. Dan buena cuenta de ello Lillas Pastia, Venta del Sotón (o en su caso, Espacio N), Callizo y Tatau, todos ellos en la provincia oscense. También la Hospedería El Batán, en tierras turolenses, el único que está destacado con estrella en esta provincia. Los zaragozanos son La Prensa, Cancook, o Gente Rara –este último laureado en la pasada edición de los galardones Michelin–.
En muchas ocasiones se convierte en un camino, que comienza con un sol y posteriormente consiguen el cuerpo celeste con luz propia. A todos ellos se suman más de 160 establecimientos galardonados con soletes, entre bares, tascas, barras, cafeterías, pastelerías, chiringuitos, terrazas, heladerías, restaurantes, bodegas, vinotecas y sidrerías
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